Última actualización: 18 de enero de 2015
Las personas experimentan dolor en todos los ámbitos de su vida, el sufrimiento es la respuesta a una enfermedad terminal oa la muerte de alguien a quien quieren mucho, ya sea una persona o un animal.. El dolor comprende cinco etapas, que fueron identificadas por primera vez por Elsabeth Kubler-Ross en su libro “Sobre la muerte y el morir” y que ilustramos a continuación.
Rifiuto
La fase de rechazo ayuda a sobrevivir a la pérdida, la noticia trastorna y la vida ya no tiene sentido. Entras en un estado de shock y negación.. Preguntas como “¿Cómo voy a hacerlo ahora?”, “¿Soy capaz de seguir adelante?” Empiezan a surgir, pero la negación y el shock te permiten sobrevivir, son una forma de manejar las malas noticias.
Cuando aceptas la pérdida, surgen interrogantes y, sin darte cuenta, comienza el proceso de sanación y la negación desaparece lentamente. Con el tiempo, los sentimientos que han sido negados salen a la superficie..
Ira
La ira es un paso necesario en el proceso de curación, incluso esta ira puede parecer interminable. Sin embargo, cuanto mayor sea la ira, antes desaparecerá y el proceso de curación podrá continuar. Surgen otras emociones, pero la ira es lo que nos acostumbramos a mostrar y no tiene límites. Sientes ira hacia los demás, hacia ti mismo, hacia tu ser querido o incluso hacia Dios.
El dolor se esconde detrás del sentimiento de ira y es normal sentirse abandonado. La ira es la fuerza temporal para gestionar la pérdida, una forma de sentirse mejor y una prueba de la intensidad del amor..
Negociación
Ante la pérdida de un ser querido, pensamos en la negociación, que puede ser un respiro momentáneo, es decir, queremos volver a la vida de antes, queremos que el ser querido vuelva a sentirse bien..
Esta es una forma de retroceder en el tiempo. Esta situación también nos lleva a sentirnos culpables pensando en lo que pudimos haber hecho y en cambio no hemos hecho.. Es una forma de negociar con el dolor. Estamos dispuestos a hacer cualquier cosa para no sentir el dolor de la pérdida. Tratemos de negociar esta pérdida.
depresión
Después de la negociación, toda la atención vuelve al presente, la sensación de vacío y el dolor vuelven aún más profundo.. Entras en una fase de depresión que parece eterna y, si bien no es un síntoma de enfermedad mental, es la respuesta adecuada a la pérdida de una persona importante.
La muerte de un ser querido es una situación muy triste y la depresión es la respuesta correcta. Si el dolor es parte del proceso de curación, entonces la depresión es un paso necesario en el camino..
Aceptación
Muchas veces se confunde la aceptación con la idea de sentirse bien por lo sucedido, en realidad se trata de aceptar la realidad de la desaparición física del ser amado, reconociendo que esa es la nueva realidad que, lamentablemente, no puede cambiar, por lo tanto se no puedo evitar aceptarlo y aprender a vivir con ello.
Cuando volvemos a vivir y disfrutar de nuestra vida, sentimos que estamos traicionando al ser amado que ha desaparecido. No es así, nunca será posible reemplazar a los que ya no están, pero siempre podremos construir nuevas relaciones..
Imagen cortesía de Mario Inoportuno.