Última actualización: 10 de abril de 2015
Esta frase del emperador Julio César simplemente ejemplifica la necesidad que tenemos de aprender a vivir el momento presente.
¿Con qué frecuencia, ante situaciones conflictivas, tendemos a anticipar eventos sin considerar que hay otras posibilidades, y, lo peor de todo, con la historia de que nos quedamos con nuestra idea, inmediatamente creemos en la opción más negativa, sufriendo por toda la carga emocional que conlleva ese suceso incluso antes de que suceda en la realidad.
Para ello sería recomendable que darse cuenta de que estamos curando la herida incluso antes de que esté allí y preguntarnos si lo que pensamos realmente sucederá así o si puede haber alternativas. si lo hacemos, seremos capaces de no atascarnos en una única posibilidad que suele tener muy pocas posibilidades de suceder como pensamos.
Además, en cualquier acontecimiento de nuestra vida nos encontraremos ante dos alternativas que se desarrollarán de forma positiva (50%) o negativa (50%), por tanto, ¿Qué necesidad hay de enfocarnos más intensamente en la opción que más daño psicológico nos causa?
Quizás deberíamos acercarnos a esta frase para frenar la tendencia a anticiparnos a los acontecimientos y esperar a que la herida esté ahí antes de curarla. ¡Esperamos que sea útil!