La indiferencia emocional en una pareja se llama ostracismo. Esta forma encubierta de abuso ocurre cuando uno de los miembros de la pareja ignora con frecuencia las necesidades, solicitudes o deseos del otro respondiendo con silencio o evitando conflictos o solicitudes.
Última actualización: 04 de junio de 2022
Existe una forma de maltrato psicológico en las relaciones que podríamos denominar ostracismo de pareja. En la antigua Grecia, para castigar a los que se consideraban peligrosos, se los sometía a proscripción y aislamiento. Esta exclusión acabó convirtiéndose en una dura condena para la persona, pues le era imposible sobrevivir si se le privaba de la protección y consideración del pueblo.
En el campo sentimental es posible presenciar la misma dinámica. Suelen ser parejas en las que la comunicación está ausente y uno de los dos excluye al otro.
Esta indiferencia incluye comportamientos tales como ignorar a la pareja, no atender su comunicación o necesidades emocionales, pero también no estar presente durante una cantidad sustancial de tiempo.
La comunicación saludable involucra tres elementos: emisor, receptor y mensaje. En las relaciones basadas en la frialdad emocional hay un mensaje y un remitente, pero no falta el destinatario.
La persona que condena al ostracismo no está dispuesta a comunicarse con la pareja, ella se niega a escucharlo y trata de silenciarlo a través de comportamientos característicos, como no contestar el teléfono o abandonar el lugar donde viven.
"A veces la indiferencia y la frialdad duelen más que la verdadera aversión".
-J. K. Rowling-
Señales de ostracismo en la pareja
Podemos entender si la pareja nos está condenando al ostracismo a través de diferentes señales. Esto es lo que son:
- Negarse a hablar sobre un tema conflictivo. Es normal, ya veces hasta saludable, que las parejas se peleen. Cuando hay ostracismo en la pareja, uno de los dos quiere resolver el conflicto o llegar a un acuerdo, pero el otro no está de acuerdo con su actitud. También puede suceder que te ignoren por completo, como si estuvieras hablando con la pared. Una situación similar repetida en el tiempo puede minar profundamente la autoestima.
- Ignorar las preguntas o responder en monosílabos. La persona marginada suele responder con monosílabos a las manifestaciones de atención que la otra persona le brinda. El objetivo es que la pareja se canse y deje de hablar. El problema es que esto genera un malestar en la pareja que no se resuelve, por lo tanto se acumula.
- Evitar cualquier tipo de contacto físico y visual. La víctima del ostracismo no se siente amada, al contrario te han rechazado hasta el punto de pensar que la pareja está disgustada. Esta idea repercute directamente en la autoestima, ya que la persona puede acabar creyendo que no merece afecto ni contacto, que no es deseable ni atractiva, etc.
- No acompañar en eventos sociales. Es cierto que todos deben ser capaces de mantener su esencia dentro de la pareja, pero también es cierto que la pareja debe estar presente. Si siempre se niega a asistir a un evento, reunión, cita, etc., probablemente no piense que son importantes.
- No busques apoyo incondicional. Muy relacionado con el punto anterior. La pareja debe dar y recibir amor y apoyo. Si cancela los planes y sueños de la otra persona, no expresa aliento ni motivación, no ofrece apoyo incondicional.
- No muestres afecto. A pesar de las dificultades, la pareja sigue amándose. Esta realidad debe ser un pilar para la relación. Se puede discutir, pero siempre con cariño, respeto y tratando de llegar a acuerdos que nos beneficien a los dos.
¿Cuáles son los sentimientos de la víctima?
El ostracismo en la pareja se manifiesta a través de diferentes comportamientos o señales. En ocasiones pueden pasar desapercibidos porque no se trata de un maltrato físico o psicológico directo. No hay insultos verbales ni humillaciones. El problema es que aun así, el ostracismo puede ser más doloroso que el ataque directo.
A veces la víctima se engaña con excusas para no dejar la relación porque piensa que esa indiferencia no es más que una conducta pasajera. Igualmente, es normal pensar que el compañero es así y que la misión de uno es tolerarlo o que no es "gran cosa".
Algunas personas a tu alrededor también pueden hacerte creer que todos tienen defectos y que, por lo tanto, debes aceptar a la pareja que se comporta de esa manera. Sin embargo, la víctima sufre todos los días porque no puede predecir cuándo su pareja comenzará a ignorarla.
A menudo se encuentra inmersa en un estado de ansiedad perenne: acumulando mensajes no hablados y asuntos pendientes. También es común sentir miedo. No nos expresamos porque la experiencia dice que la indiferencia puede reaparecer, por lo tanto también el dolor y la tristeza que genera.