Última actualización: 28 marzo, 2016
La empatía es un rasgo que muchas personas siempre han tenido, pero que otros necesitan adoptar. Empatizar significa comprender por qué la persona que tenemos delante actúa de determinada manera. Sabemos cómo entenderlo.
Esto no quiere decir que estemos de acuerdo con la otra persona, sino simplemente que sabemos leer en ella la razón por la que actúa de determinada manera, más allá de las apariencias.
“La capacidad de ponerse en el lugar de los demás es una de las funciones más importantes de la inteligencia. Demuestra el grado de madurez del ser humano”.
-Augusto Cury-
La empatía no solo nos ayuda en nuestras relaciones con los demás, también nos ayuda a nosotros mismos de manera directa. Comienza a ponerlo en práctica de inmediato.
¡Mejora tu empatía!
Si ya eres una persona empática, debes aprender a mejorar esta cualidad, para poder aprovecharla al máximo. Si por el contrario te cuesta ser empático con los demás, es hora de intentar ponerse en los zapatos de unltri.
No es un ejercicio fácil, pero tampoco imposible. Para empatizar basta con empezar a observar, deja de lado tu yo, tu punto de vista y comienza a mirar el mundo con otros ojos.
Algunas personas hacen esto automáticamente, pero para otras es un hábito muy difícil de adoptar. Sin embargo, con el tiempo y la práctica, lo lograrás. Mientras tanto… ¿quieres saber cómo mejorar tu empatía?
- La observación es uno de los pasos más importantes. la empatía, especialmente el estudio de los comportamientos no verbales. Es posible que una persona esté diciendo algo, pero su lenguaje no verbal está comunicando información completamente diferente. Analizar los gestos y movimientos de tu interlocutor puede ser muy útil, ya que reflejan sus emociones y sentimientos más profundos.
- Escuchar también es muy importante: tanto escuchar la comunicación verbal como la no verbal. Es mucho más importante escuchar a tu interlocutor que hablar. Gracias a la escucha activa y la observación, podrás ponerte en la piel de la persona que tienes delante y comprenderla.
- La comprensión es el último paso para mejorar la empatía, porque al observar y escuchar a tu interlocutor, te darás cuenta de que comprendes lo que está pasando, aunque no lo compartas. No compartir un comportamiento no implica juzgar al otro, sino comprenderlo, abrir la mente y dejar entrar al otro. Respeta un cierto comportamiento y entiéndelo, incluso si no estás de acuerdo.
Ser empático significa poder sumergirse en el mundo emocional del otro, pero sin ahogarse en él.
La comprensión fomenta la empatía
No es posible ser empático si no se respeta, ni se comprende, las reacciones y comportamientos de los demás.. Nunca juzgues porque, quizás, algún día tú también hagas justo lo que ahora estás criticando.
Abrir tu mente y entender lo que no compartes te permitirá aprender un poco más sobre las relaciones personales y te ayudará a ser más empático con los demás.
Tanto si eres empático por naturaleza como si te esfuerzas por serlo, para empatizar con los demás siempre debes tener en cuenta los siguientes puntos:
- Mira a tu interlocutor con interés.
- Controla tus emociones, y si no estás de acuerdo con algo, no lo demuestres.
- Déjale claro al otro que entiendes su situación.
- Profundiza en la información proporcionada por tu interlocutor.
- Muestra tu apoyo.
Todo esto te ayudará a entender a la otra persona y hacer que se sienta cómoda. Es algo que también necesitas cuando quieres que te entiendan: alguien que sepa y pueda ser empático contigo.
“Por lo general, para las personas que son rígidas, inflexibles, arrogantes, autoritarias… es muy difícil ser empático, entender lo que están viviendo los que están a su alrededor. Han perdido su capacidad de observar y, con ello, su capacidad de comprensión”.
-María Jesús Alava Reyes-
A veces es muy difícil ser empático con los demás, y esto sucede cuando surge el dolor y la decepción.. Estas emociones negativas son mucho más fuertes que la sensibilidad, por lo que se pierde la perspectiva adecuada y la empatía necesaria.
Es posible aprender a ser empático, pero hay que esforzarse y practicar la observación, la escucha activa y la comprensión. ¿Quieres aprender a entender a los demás? ¿Quieres saber cómo entender los diferentes comportamientos? Esta habilidad te enriquecerá tanto a ti como a tus relaciones interpersonales.