La verdadera amistad sobrevive a las tormentas

La verdadera amistad sobrevive a las tormentas

La verdadera amistad sobrevive a las tormentas

Última actualización: 10 septiembre, 2022

Nuestra amistad ha pasado por momentos difíciles, pero la fe en el cariño mutuo que sentimos los ha conquistado.. Ahora entiendo que las relaciones reales pueden fallar por las circunstancias, pero al final nada ni nadie puede destruirlas. Puede haber pausas, pero luego la melodía continúa, más fuerte, más enérgica, más entusiasta.

Cuando ni siquiera imaginábamos lo fuertes que podíamos ser juntos, todas las dudas se disiparon y borramos las sombras que querían que cayéramos.. Y así, cuando amainó la tormenta, nos tomamos de la mano y nos abrazamos: nuestros miedos se convirtieron en nuestras fortalezas.



El valor de la amistad

Lo que te digo es que nuestra fuerza es el maravilloso valor de nuestra amistad: ese sentimiento de felicidad y orgullo que sentimos al cultivar una relación eterna, pura y sincera. Porque sí, no hay otro vínculo tan cercano como el que va más allá incluso de los kilómetros, que va más allá de la infancia, del paso de los años, que nos permite encontrar una familia.

Hemos pasado por todo y nos han pasado un millón de cosas. Sin embargo, el valor de la amistad es precisamente el de compartir experiencias y lecciones de vida: no puede existir sin ella, pero se fortalece precisamente por eso.

Los lazos que se forman honestamente no deben romperse

Deseo de todo corazón que el vínculo contigo, que honestamente fue creado, nunca se rompa. Tú y yo sabemos mejor que nadie que no fue fácil salir de ese túnel en el que estábamos. Sin embargo, Seguimos aquí, agradecidos con la vida por mantenernos juntos..


Argumentos, enfados, malentendidos, pequeñas mentiras sin importancia, sin intención de causar dolor o herir. Con el propósito de protegernos unos a otros en equilibrio sobre el frágil hilo de la vida. Somos humanos y adultos, por lo que es normal haber vivido todo esto. Lo bonito es que, a pesar de todo, hemos aprendido a salir adelante, juntos.


La tarea más difícil como amigo es ofrecer comprensión cuando no entendemos.

¿Recuerdas cuando nos enfrentamos a esa trágica noticia? Lo hicimos juntos, tomados de la mano. Hemos pasado por la tormenta y nos sentimos más fuertes solo por estar cerca.

Me enseñaste lo que significa perdonar, a superar los errores de aquellos que no quisieron hacer daño, aunque lo hicieran.. Me has dado el valor de que el cariño es más fuerte que el reproche, la empatía es más fuerte que el orgullo y la separación en la amistad es una ilusión.


Tener un amigo también significa ser uno

Estoy seguro de que lo que tenemos es posible porque es verdad y no hemos perdido la fe. También sé que una de las razones por las que es posible es también porque somos amigos de nosotros mismos, de hecho uno no puede ser amigo de alguien sin ser uno antes que uno mismo.

Tener un amigo también significa ser uno, consigo mismo y con los demás. Este es el secreto de la amistad: es decir, ser amigo de uno mismo, sin olvidar ser amigo de los demás y que los demás sean amigos de nosotros. La reciprocidad en nuestra relación es especial..


Así que tú y yo no necesitamos agradecernos, solo amarnos y poder demostrarnos. Ya lo sabes, pero te lo vuelvo a decir: no hay tormenta, circunstancia o conflicto que nos pueda abrumar si creemos en nuestra amistad.

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