Los mitos familiares tienen la tarea de ocultar secretos familiares que provocan malestar, vergüenza o culpa. Sobreviven porque suelen proteger, defender y organizar la estructura familiar, guardando secretos que se transmiten de generación en generación.
Última actualización: 29 agosto 2022
Los mitos familiares son creencias y fantasías compartidas por toda la familia. Estas creencias conciernen a la familia misma ya los lazos que la unen. Se aceptan como verdaderas y determinan el comportamiento del individuo y de la colectividad de ese grupo humano; además de esto, determinan los roles del individuo.
En general, los mitos familiares pertenecen al preconsciente, es decir, se mueven entre la dimensión de la conciencia y la del inconsciente. Esto quiere decir que la familia reconoce que tiene ciertas creencias, pero no está claro hasta dónde llegan ni por qué se dan por ciertas.
Aunque los mitos familiares se definen como una creencia ficticia, por supuesto detrás de ellos casi siempre encontramos verdades dolorosas o intolerables para la familia. A grandes rasgos, las claves de la existencia de estos mitos se encuentran en normas secretas o implícitas que cada familia nutre desde dentro.
La familia es como una jaula; los pájaros de afuera están ansiosos por entrar y los de adentro están ansiosos por salir.
-Michel de Montaigne-
Las características de los mitos familiares.
Los mitos familiares toman forma sobre todo en la asignación de roles familiares. Estas creencias definen quién es "la oveja negra" o el "modelo a seguir", etc. Tiende a haber una fuerte resistencia a los cambios de roles; en algunos casos, además, este aspecto se convierte en un tabú. Otras características de estos mitos son las siguientes:
- Ellos definen las relaciones dentro de la familia
- Representan la imagen que la familia tiene de sí misma.
- Nos resistimos fuertemente a cualquier intento de cambiar las creencias.
- Tienen la tarea de ocultar una realidad que la familia se niega a aceptar.
- Ellos tienen siempre una base de verdad.
- Se transmiten de generación en generación.
- Están presentes en todas las familias, en mayor o menor medida.
- Representan una forma en que la familia se relaciona con el entorno cultural.
Estos mitos son básicamente de tres tipos: historias para infundir armonía, redención de la culpa, reparación y salvación. Veámoslos juntos.
Mitos familiares armoniosos
Cuentos para infundir armonía pertenecen a esas familias que construyen una imagen idílica de sí mismos. Estos desarrollan una serie de comportamientos para convencerse de que el equilibrio, la unidad y la fraternidad reinan entre sus miembros. En fin, como si no hubiera problemas en esa familia.
En principio, la familia en cuestión construye una imagen de fachada para los demás. Hay un sentimiento de culpa que uno pretende enterrar y la idea de perfecta armonía sirve como medio para no ser acusado ni juzgado por los demás. La depresión y el aburrimiento ocurren típicamente en estas familias, así como fuertes hostilidades no resueltas.
Mitos de las excusas y la redención
Estos mitos son más complejos ya que requieren una elaboración más profunda. En este caso uno o más miembros son culpados por la desgracia o los problemas familiares. Estas personas pueden estar vivas o muertas; a veces también se culpa a un individuo ajeno a la familia, pero que tiene alguna relación con ella.
El ejemplo más evidente es el del “chivo expiatorio”, quien ocupa este rol es culpado de las dificultades o problemas existentes. Esta dinámica redime a otros miembros de la familia de sus responsabilidades.. En este caso, se activa un mecanismo de proyección colectiva.
mitos sobre la salvacion
Cuando los mitos familiares sobre la salvación están presentes, los miembros de la familia construyen la figura del "salvador mítico". Este último es un personaje del que se espera una intervención de redención, ya se trate de un problema específico o de dificultades generales. Se cree que este salvador tiene el poder de ofrecer lo que falta y desbloquear lo que no desaparece.
La figura del salvador mítico puede estar encarnada por uno de los miembros de la familia, pero también puede ser una figura externa. Muy a menudo las familias asumen este papel de psicólogo, pero lo cierto es que deberían emprender un camino de psicoterapia.
Cuanto más patológicas son las relaciones familiares, más a menudo tienden a surgir y consolidarse los mitos familiares. Estos son parte del camino equivocado para abordar, sin realmente abordarlos, problemas que necesitan ser monitoreados y resueltos.
