Última actualización: 22 de enero de 2015
El perdón es la liberación de los límites autoimpuestos y de los cánones de conducta destructivos que nos atan al pasado de manera insensata. El perdón también libera la ira, el miedo, el dolor, el resentimiento y otros sentimientos negativos, abriendo el corazón a la alegría, la paz y el amor.
Incluso si no es fácil, no se debe permitir que el pasado prevalezca sobre nuestra vida; tenemos que liberar el dolor que sentimos y las limitaciones que nos impiden vivir la vida al máximo.
¿Cuáles son las razones para practicar el perdón?
Practicar el perdón nos permite:
- Liberarnos del resentimiento.
- Es la clave para una buena salud física, psicológica y emocional.
- Liberarnos de todos los sentimientos negativos.
- Encontrar paz.
- Mejorar la vida social, ya que dejamos de sentir hostilidad hacia las personas.
Cómo fomentar el perdón
Aquí hay algunos consejos para desarrollar su capacidad de perdonar:
, Encuentra tiempo cada día para meditar y explorar tu mente, para tratar de liberar cualquier resentimiento aprisionado. Visualízate con un gran nudo en la garganta, respira despacio e imagina que poco a poco se derrite y te sientes más libre y ligero. El poder de la imaginación es enorme.
- El perdón no significa reconciliación, no debes excusar a la otra persona, ni tolerar su comportamiento; solo tienes que dejar de lado tu sufrimiento.
- Si sientes una profunda hostilidad hacia alguien, escribe una carta de perdon donde muestras tus sentimientos. Si no quieres enviarlo, no lo hagas, pero sigue siendo una forma de hacer desaparecer los sentimientos negativos hacia la otra persona. Si repites la escritura de notas de perdón todos los días, puede ser una válvula de seguridad útil para su cuidado.
,No permitas que el ambiente negativo de gente insensible y temeraria de recurrir a ti, moverte en entornos de bienestar, donde puedas mantener tu mente y la energía que te rodea sana, libre de contaminación.
- Recuérdalo no debes excluirte del círculo del perdón, tienes que perdonarte por no ser perfecto, por cometer errores como los demás. Mereces la misma comprensión y compasión que los demás, para encontrar el positivismo y la libertad y vivir en paz.
La capacidad de perdonar no funciona igual en todas las personas, algunas tardan más que otras en desarrollarla, pero es una meta que se puede lograr. El que es incapaz de perdonar es propenso a sufrir de ansiedad, depresión, problemas cardiovasculares, dolor de espalda crónico, deterioro de las funciones neurológicas y mal funcionamiento del sistema inmunológico, además de no tener vida social, llegando a sentirse solo y miserable, incapaz para disfrutar plenamente de la vida.
Imagen cortesía de Kiezuz
