Última actualización: 13 de diciembre de 2017
Sapiosexual es el término utilizado para indicar a una persona que considera la inteligencia el principal factor de atracción sexual. La palabra proviene del latín “sapiens”, que significa sabio o juicioso.
Los sapiosexuales se activan emocionalmente ante estímulos innovadores y prestan poca atención a lo repetitivo. Rasgo que la psicología de la personalidad define como apertura a la experiencia.
Precisamente por eso, sí. se sienten atraídos sexualmente sobre todo por conversaciones que abren su mente a nuevos horizontes. Esta excitación, que al principio es sólo mental, acaba extendiéndose a otros niveles, como el físico, el emocional y el erótico.
Este fenómeno puede afectar a ambos sexos, es decir, tanto a hombres como a mujeres. Sin embargo, es más común o más expresado por el género femenino, ya que las mujeres se fijan menos en la apariencia física que los hombres y necesitan otros estímulos para enamorarse.
Inteligencia sapiosexual y erótica
El psiquiatra Lister Rossel sostiene que el cerebro es el principal órgano sexual, incluso antes que la piel y los órganos genitales. Por su parte, la sexóloga Emma Ribas afirma que la seducción intelectual añade mayor calidad a la relación, ya que la inteligencia despierta un deseo que luego se traduce a nivel físico.
Para los sapiosexuales, la conversación se convierte en un juego sexual entre dos mentes. Les encantan las sorpresas. Frecuentemente dejan espacio al deseo y saben mantenerlo vivo a través del misterio. Esta actitud se conoce como inteligencia erótica.
Sin embargo, sentirse atraído por la inteligencia también puede presentar algunos peligros, especialmente en personas inseguras o con baja autoestima. En estos casos, de hecho, se pueden establecer relaciones adictivas a medida que las personas inseguras se empequeñecen. Admiran a los que creen inteligentes, porque no se ven a sí mismos como tales.
Encontrar el amor dentro
Las redes sociales están dando visibilidad, a partir de nuevos paradigmas léxicos, a conceptos que han existido toda la vida. Según el sociólogo Francesc Núñez, buscar etiquetas para definir las relaciones no es nuevo, sino una necesidad humana funcionar sobre la base de estereotipos y prejuicios que nos guían en la vida social.
En este sentido, sapiosexual es uno de los términos que se han puesto de moda para describir una circunstancia que ha existido siempre: la atracción sexual hacia la inteligencia de los demás. Aunque el término es nuevo, el vínculo entre inteligencia y mente como atracción interpersonal se remonta a los escritos del filósofo Platón, allá por el año 380 a.C.
Los sapiosexuales se dejan seducir por la palabra. Les encanta tener conversaciones y diálogos de calidad que les estimulen y les hagan huir de la superficialidad, encontrando el amor en el interior de la otra persona. Sin embargo, ser sapiosexual no significa no tener en cuenta otros parámetros, como el aspecto físico o la personalidad.
También es posible que estas personas se estén conectando inconscientemente la inteligencia de la pareja con una relación más segura y estable. De alguna manera, asocian la inteligencia con mejores decisiones y protección en la relación.
La sapiosexualidad es otro aspecto a incluir junto con el resto de criterios que utilizamos para elegir a la persona con la que nos gustaría estar. En última instancia, si queremos pasar nuestro tiempo con una persona, también podríamos traernos conversaciones interesantes y ser capaces de mantener vivo el misterio y el deseo.
