Última actualización: 19 de febrero de 2016
“Estás haciendo las cosas mal”, “este color no te sienta”, “¿pero a dónde quieres ir vestido así?”, “No eres capaz de defenderte”, etc. Estos son solo algunos de los juicios que escuchamos de todas las personas que tienen tendencia a criticar todo el tiempo. ¿Tal vez eres el primero en criticar?
Tanto si te han criticado como si eres la crítica, debes saber que este comportamiento es síntoma de una considerable falta de confianza y autoestima. Quizás niegues este hecho, pero es así. ¿Sabes que? Con frecuencia las críticas que se te dirigen no son ciertas, son simplemente admiración o envidia recubierta de negatividad.
"No olvidemos que las críticas injustas suelen ser elogios disfrazados"
(Dale Carnegie)
No hay críticas constructivas.
A veces, somos nosotros los que pedimos a las personas que nos rodean que brinden una crítica constructiva o son otros los que, para justificarse, llaman a sus comentarios "crítica constructiva", como si, así definidos, dolieran menos.
La crítica nunca es constructiva, ya que nos destruye y daña nuestro ego.. Podemos verlos positivamente, pero en lo más profundo de nosotros mismos nos duelen. ¿Sabes qué hay detrás de todos estos comentarios llamados "constructivos"?
- Crítica corrosiva, cuyo objetivo es hacer que la persona que las habla se sienta mejor. Tal vez este individuo sienta una ira terrible en su interior y necesite descargarla en alguien; ustedes son sus objetivos. Sin tener culpa alguna, has estado en el centro de una imparable lluvia de críticas. Críticas inútiles, negativas, cuyo único fin es herir.
- crítica destructiva, que hunden nuestra autoestima, que la pisotean y que nos hacen sentir personas sin valor, privados de algo que ofrecer, inútiles. Tales críticas nos angustian, se enfocan en los aspectos negativos de lo que hacemos y nos hacen sentir incapaces.
- Críticas agudas. Somos sensibles tanto a los elogios como a las críticas; por eso es importante estar seguros de nosotros mismos, tener fe en nuestras capacidades y cultivar nuestra autoestima. De esta manera, ninguna crítica puede hacernos daño.
He aquí lo que se esconde detrás de las llamadas críticas constructivas, que no tienen nada de constructivas, al contrario: son destructivas. Ya sabemos por nosotros mismos lo que hicimos mal gracias a nuestra capacidad de autocrítica.
No tenemos por qué buscar en los demás las críticas que ya nos hacemos nosotros mismos y de las que aprendemos a mejorar. No pidas a los demás que te juzguen, porque te harán daño.
“Afronta tu camino con valentía, no temas las críticas de los demás. Y, sobre todo, no os dejéis bloquear por vuestras propias críticas”.
(Paulo Coelho)
Estamos rodeados de críticas.
Toma todas las críticas que te hagan. Puede ser que hayas pedido a otros que comenten algo y te hayas dado cuenta de que no era una buena idea; otras críticas, sin embargo, también llegan sin tu petición, sin motivo.
Estamos rodeados de críticas. Constantemente estamos siendo observados y todo lo que hacemos será criticado. Quizás porque hay personas que están tan aburridas que necesitan criticar la vida de los demás o quizás simplemente porque están tratando de encontrarle sentido a la suya.
Debemos aprender a entender cuáles son nuestras fortalezas, aprender de nuestros errores, tener fe en nosotros mismos y no dar demasiada importancia a lo que digan los demás. Sobre todo porque estos comentarios son fruto del aburrimiento: algunos ni siquiera están hechos para hacer daño, sino que simplemente nacen de la monotonía y la falta de temas de los que hablar.
La crítica es una escalera para subir
Toma las críticas y construye un paso para cada una, de la misma manera que aprendes de tus errores.. Visualiza esta escalera en tu mente, que puede ser larga o corta. Cuando lo visualices, empieza a subir los escalones y verás que en lugar de sentirte peor frente a las críticas, ¡te sentirás mucho mejor!
"Criticar mis defectos no reducirá los tuyos"
(Anónimo)
Sube los peldaños de esta escalera hecha de crítica y verás como la superas, cómo avanzarás y cómo crecerás gracias a ella.
A menudo tiendes a ver el lado negativo de las cosas que te suceden, pero, como con los errores, también puedes aprender algo de las críticas: te pueden ayudar a crecer. ¿A qué esperas para construir tu escalera?
Imágenes cortesía de Joe Diamond, DawnElaineDarkwood, Loika