Última actualización: 19 de junio de 2015
Dos caminos se bifurcaban en un bosque, y yo...
Tomé el menos transitado,
Y eso hizo toda la diferencia
Robert Frost
Solo puedes crecer si estás dispuesto a sentirte incómodo por un tiempo. Esa es la forma como es. No te estamos diciendo que todo lo que quieres está fuera de tus cuatro paredes emocionales, pero todo lo que quieres o anhelas sí lo está.
Los eventos positivos no suceden por casualidad, suceden porque los atraemos y porque tenemos todo para crearlos. Básicamente, suceden porque vamos a la montaña y no esperamos a que la montaña venga a nosotros.
En efecto la única forma de alcanzar nuestros sueños es asignándoles una fecha de caducidad. Por extraño que parezca, esto cambia algo en nosotros. Si estamos seguros de que las posibilidades que nos ofrece la vida vencerán en cualquier momento, cargaremos las pilas para alcanzar nuestros objetivos.
También es posible que al poner fecha de caducidad a nuestras aspiraciones, nos demos cuenta de que no hemos delineado adecuadamente lo que queremos y que debemos reinventar lo que anhelamos.
la zona de aprendizaje
Más allá de lo que ya sabemos, hay una zona de aprendizaje. Este es el terreno a partir del cual salir para ampliar nuestra cosmovisión y ganar conocimiento. Estamos allí cuando estudiamos, observamos, experimentamos, comparamos, viajamos y conocemos gente nueva.
A muchas personas les gusta aprender y salen con frecuencia a disfrutar de la vista de nuevos horizontes, pero también hay personas que tienen miedo de esto y que no transitan estos caminos a menos que estén obligados a hacerlo.
Estas son las personas que sienten que salir de su zona de confort es un peligro, los que salen del trabajo y van a casa a cenar con su pareja, ver la televisión y dormir, limitando su vida a la rutina diaria.
La zona de pánico
Mucho más allá de la zona de confort, está la zona de pánico. Sin embargo, esta zona existe solo para los que viven cómodamente y para los que no se atreven a cuestionar su vida. Aquí es donde la gente nos dice “no lo hagas”, “fracasarás”, “el riesgo de atrapar un cangrejo es enorme y pueden pasar cosas horribles”.
Lo que la gente se niega a saber es que la única forma de hacer crecer un jardín lleno de hermosas flores es rompiendo con las convenciones autoimpuestas como individuos y como sociedad.
A la zona mágica
Esta es la zona en la que aparecen cosas maravillosas, en las que magnificamos nuestros sueños y logramos superarnos a nosotros mismos.
Cuando estés aquí, es probable que tengas mucho miedo. Por ejemplo, seguro que de repente te asalta un miedo inmenso de haber perdido tu zona de confort, pero luego te das cuenta de que no es así: tu zona de confort no ha sido eliminada, sino que ha crecido.
Mientras que la tensión creada por tu comodidad emocional te invitará a retroceder y no continuar, tu tensión motivacional te empujará a continuar haciéndote las cosas más fáciles.
Es normal que tengamos miedo a hacer el ridículo, a fallar, a no tener tiempo para nuestra familia o para hacer otras actividades que nos gustan; pero la única manera de deshacernos de los miedos es enfrentándolos, tomando conciencia de lo que nos falta por aprender.
Ahora es el momento en que tienes que parar y piensa lo que es y lo que no es en tus sueños de vida. Es algo que nos pasa a todos, empezamos a acumular los días en que no pasa nada en nuestras agonizantes agendas y dejamos vacías las estaciones de tren de nuestra vida.
Nos atreveríamos a decir que si tienes miedo, miedo de verdad, y al mismo tiempo hay algo que te empuja a seguir, entonces estás en el camino correcto. Recuerda que no podemos descubrir nuevos mares a menos que perdamos de vista la costa.
Imagen cortesía de: natalia_maroz
