Última actualización: 30 de mayo de 2015
No importa si lleváis unos meses o varios años viviendo juntos, si estáis casados o no. El secreto de una pareja feliz y, sobre todo, sana, es empezar a construirla desde el primer día. Seguro que sabes que es necesario dar y recibir. "Saldo”Es una de las principales palabras que describen a una pareja, porque todo debe ser lo más equilibrado y justo posible.
Si la persona que da o que recibe es siempre la misma, a la larga la relación se desgastará y empezarás a sufrir. Nadie dice que una pareja perfecta nunca tiene problemas, no pelea ni pasa por momentos difíciles: todo lo contrario. La pareja ideal es aquella que, a pesar de todo, sigue avanzando, juntos y de igual a igual.
Por eso, si estás pasando por un momento difícil con tu pareja, crees que las cosas han cambiado, que discutes más seguido, que no te escuchas o que ya no tienes la misma sintonía, puede ser el momento adecuado para echar un vistazo a estos consejos, dados por un experto en psicología de pareja y familia.
7 Hábitos que fortalecerán a la pareja
1. Esté dispuesto a cambiar sus deseos y necesidades. Esto significa que no siempre podrás hacer lo que quieras, porque la otra persona también tiene derecho a disfrutar de las cosas que le gustan. Encontrar un compromiso, para que ambos seáis felices, es un deber a tener en cuenta. Esto no significa dejar de lado nuestras preferencias, sino, como te acabamos de decir, ser más justos. La necesidad de tener siempre la razón tampoco es nada saludable. Ser más tolerantes: es la única forma de hacer más amena la vida en pareja. Aprende a aceptar los hábitos e incluso los “caprichos” de tu pareja, pero siempre manteniendo el equilibrio.
2. Disfrutar de la compañía del otro. Uno de los problemas más comunes es que cada uno hace lo que quiere, sin la compañía de su pareja. Esto tiene sus puntos buenos, pero también es necesario compartir momentos, desde ver una película juntos hasta salir a caminar. También puede ser un simple desayuno en la cama el domingo por la mañana, una cena solo en casa (sin los niños, por ejemplo), una escapada romántica de fin de semana, etc. Intenta encontrar al menos un momento al mes para hacer algo exclusivamente para la pareja, sin nadie más. Otra cosa que muchas veces parece difícil es ser feliz cuando tu pareja hace algo que no nos gusta mucho. Por ejemplo, cuando nuestro marido quiere ver un partido de fútbol o nuestra novia una comedia romántica (o viceversa, ¡a las mujeres no necesariamente les gustan los deportes ya los hombres no les gustan las películas de amor!). Traten de ser más comprensivos y compartan estas pasiones juntos.
3. Di cosas positivas sobre tu pareja frente a otras personas. Cuando estás en público, en una fiesta de cumpleaños, reunión, cena, etc. nunca critiques a tu pareja, no lo insultes y no te burles de él/ella para ridiculizarlo. En reversa, tu actitud debe hacer que tu pareja se sienta segura, apoyada y, sobre todo, respetada. Felicítelo destacando los mejores rasgos de su personalidad o mencione el éxito en el trabajo, la universidad, etc.
4. Siéntete seguro. No hay nada mejor que la sensación de tranquilidad que da un lugar donde nos sentimos seguros. Basta un abrazo o una caricia: no hace falta que sea un lugar físico, sino una sensación. Cuando dos personas se sienten completamente seguras juntas, es mucho más fácil crear una buena relación. Esté siempre abierto al diálogo, no tenga miedo de malentendidos o diferentes puntos de vista. No tienes que temer que el otro se enfade, pero siempre pídele su opinión y acepta la respuesta. Esto mejorará mucho su intimidad (que no siempre es sólo sexual) y dará a la pareja frescura y salud.
5. Comunicarse para poder entenderse. Trate de hablar cuando ambos estén tranquilos, no cuando la ira o el nerviosismo puedan estar jugando una mala pasada. Recuerda que un desacuerdo, por pequeño que sea, si no se resuelve, puede derivar en una pelea mucho mayor e incluso en una ruptura. No tienes que dejar que esto suceda, pero siempre habla de ello en el momento adecuado y de la manera correcta. Esto también significa adoptar una posición de apertura y buena voluntad, y una actitud correcta. No desafíes al otro, no seas irónico y no busques la pelea.
6. Disculparse es un acto de generosidad. Es también una demostración de arrepentimiento y compromiso. Puede sonar trillado y simple, pero esta palabra de cinco letras es una de las más difíciles de pronunciar, especialmente cuando estamos enojados, heridos, tristes, nerviosos, etc. Otro tema importante es aprender a aceptarlo. Siéntase libre de expresar sus emociones, e si no eres una persona que se disculpe con facilidad, es bueno que trabajes con ello. Lo mismo ocurre con el "gracias".
7. Duerma lo más juntos posible. Algunos dicen que es vital irse a la cama con los problemas resueltos, otros que lo mejor es dormir sobre ello y luego pensar de nuevo. Pero se ha demostrado que dormir acurrucado al lado de tu pareja mejora mucho la calidad del sueño, evita las pesadillas, permite descansar mejor, alivia el estrés, etc. Así que ahora ya sabes: por el bien de su salud física y mental, solucionen problemas y duerman abrazados!
Imagen cortesía de alybaba