Última actualización: 10 septiembre, 2022
Un estudio reciente de la APA (Association of American Psychologists) publicado en Psychology and Aging permitió demostrar lo que muchos sospechábamos: a medida que pasan los años, los parámetros de la amistad cambian. En términos concretos, a los 30 años, la calidad es más importante que la cantidad en la amistad.
Este estudio revela que a los 20 nos relacionamos con una gran variedad de personas que enriquecen nuestra cosmovisión, que afecta nuestra personalidad y amplitud de expectativas.
A los 30, sin embargo, socialmente estamos agotados de entretener a otras personas y preferimos más calidad. en nuestras relaciones y materializar todo lo aprendido en bienestar.
El estudio mostró que las relaciones de ambos grupos de edad tenían un efecto a largo plazo: las personas que tenían muchos amigos a los 20 y pocos a los 30, pero de mejor calidad, mostraban una mayor salud psicológica a los 50. La conclusión no se traduce en tener menos amigos a los 30, sino en seleccionar adecuadamente aquellos que realmente nos hacen sentir bien.
Amistad a lo largo de la vida.
La importancia que le damos a la amistad se mantiene constante a lo largo de la vida., pero en cada etapa se manifiesta de manera diferente.
Cuando somos pequeños damos más importancia a las figuras autoritarias que nos rodean: padres y maestros. Nos relacionamos con otros niños para desarrollar gradualmente la conciencia de nuestra individualidad personal, para poner en marcha nuestras habilidades emocionales, cognitivas y sociales a través del juego y la escuela.
Durante la adolescencia, el concepto de amistad cambia radicalmente. En esta fase, las relaciones con nuestros iguales y no con las figuras de autoridad determinarán nuestro carácter y nuestra incipiente formación identitaria, que será más o menos atormentadora a partir del hecho de poder relacionarnos con otros adolescentes similares a nosotros.
En esta etapa la amistad se vive con más intensidad y se normalizará con la llegada de la juventud, cuando la amistad jugará un papel crucial en el desarrollo de nuestra personalidad, nuestros hábitos y nuestros intereses. A medida que nos acerquemos a los 30, estas relaciones serán menos y más selectivas.
amigos a los 20
Cuando tenemos 20, nuestro mundo entero está hirviendo. No tenemos muchas cosas claras, pero actuamos sin miedo y con tanta espontaneidad como para llevarnos a conocer a muchas personas. Los dolores también se viven con mucha intensidad y vivimos en el polo de la intimidad versus el aislamiento, ya que todo parece estar muy polarizado.
Necesitamos conocer gente nueva que nos alimente, sin demasiados prejuicios ni expectativas… Nos encontramos con pruebas sociales continuas con personas que no conocemos, porque las necesitamos, necesitamos disfrutar de nuestra libertad y ver qué es lo que realmente nos importa.
