El verdadero amor no duele. Amar con madurez, inteligencia y equilibrio requiere dejar de lado las adicciones y los miedos. Todo esto ayudará a crear lazos felices y plenos.
Última actualización: 24 marzo, 2022
“Siempre trabaja y no me hace caso”, “Nunca me da regalos”, “Si no quiere estar siempre a mi lado es que no me quiere”… Detrás de estas quejas comunes, se puede ocultar una realidad compleja que, a la larga, provocará una clara infelicidad en la relación. ¿Es amor verdadero o adicción?
En lugar de enriquecer, ofrecer impulso, crecimiento y satisfacción, tal relación se centra en la carencia, en la necesidad de recibir continuas demostraciones de afecto. Todo esto conduce muchas veces a una presión malsana en la que aparecen chantajes, miedos y aprensiones.
La persona presa de la dependencia emocional tiene baja autoestima. Le atribuyes tan poco valor que renuncias a tu vida, a tus valores y a tus sueños. ¿Cómo saber si la relación se basa en el amor verdadero o en la dependencia emocional?
"Dar poder a alguien o algo para que te domine y tome el control de tu mente es una forma de suicidio psicológico".
-Walter Rice-
¿Qué es la dependencia emocional y por qué se produce?
La adicción emocional es la adicción a otra persona.. No siempre se trata de la pareja, pero sin duda es el caso más típico. Podemos compararlo con la adicción al alcohol u otras drogas.
Cabe señalar que esta dinámica se presenta en ambos sexos; aunque se piensa que es más común entre el género femenino, nos encontramos ante una realidad tan común como recurrente tanto en hombres como en mujeres.
El estudio realizado por la Universidad de Canterbury por el psicólogo Bruce J. Elliss destaca datos muy interesantes al respecto.
Baja autoestima
Las personas con dependencia emocional albergan en sí mismos pensamientos de inferioridad y baja autoestima.
- Son perfiles que requieren confirmación constante.
- Tienden a idealizar a la otra persona.
- Tienen miedo a la soledad y al abandono. Carecen de adecuada realización personal, madurez emocional y autonomía.
- Dificultad para tomar decisiones.
Estos pensamientos significan que en el momento en que alguien los nota, se sienten tan valiosos e importantes que no pueden "perder la oportunidad".
Aunque al principio no se sientan atraídos por la otra persona, terminan rindiéndose porque se hacen visibles al mundo. No saben si su relación se basa en el amor verdadero o en la dependencia emocional.
Evidentemente no eligieron a su pareja porque tengan intereses comunes o porque se sientan en sintonía, sino por la necesidad de ser amados y el miedo terrible a ser rechazados o sentirse solos.
No es amor verdadero, es sufrimiento.
Las relaciones construidas sobre la dependencia emocional no están alimentadas por el amor verdadero. Poco a poco la persona adicta va dejando de lado planes, sueños y metas. También se distancia de su familia y amigos. Permanece aislado e incluso se distancia de sí mismo.
Adicción emocional y sufrimiento
Cuando te faltas al respeto así, es normal experimentar ansiedad e incluso depresión. No eres feliz y no amas a tu pareja.
El miedo al abandono es más fuerte que el deseo de ser uno mismo. Sería demasiado arriesgado. Además de esto, la persona adicta siente la necesidad de ejercer control sobre su pareja, de saber dónde está en todo momento, con quién está y qué hace.
Hay una clara falta de confianza que nace de la idea de que “soy tan inferior y valgo tan poco, que me puede traicionar”. Como resultado, surgen numerosas discusiones.
Se producirán dinámicas que oscilarán entre la distancia y la reconciliación, altibajos emocionales por los que la persona dependiente será cada vez más débil desde el punto de vista psicológico.
La necesidad de construir relaciones maduras y conscientes basadas en el amor verdadero
La adicción emocional no es un amor sin límites que todo lo puede y lo justifica, sino que favorece una relación carente de confianza, respeto, libertad y autenticidad.
Los expertos recomiendan fórmulas muy útiles para afrontar estas situaciones. El propósito no podría ser más claro: establecer relaciones más equilibradas, maduras y conscientes.
Aumentar tu autoestima teniendo claro quiénes somos y actuando en consecuencia es el primer gran paso. También debemos aprender a estar solos, dejando de lado la necesidad de aprobación y el miedo al rechazo. Todo esto ayudará a construir el amor verdadero.
