Última actualización: 21 septiembre, 2015
No desesperes, ni siquiera de no desesperarte. Cuando todo parece estar llegando a su fin, en ese momento surgen nuevas fuerzas para seguir adelante; y en esto consiste el sentido de la vida.
Franz Kafka
Seguro que en algún momento de tu vida te has sentido frustrado. Cuando quisiste lograr algo pero fallaste, cuando tenías una meta y un obstáculo te dificultaba llegar a la meta...
Es normal sentirse frustrado a veces. Sin embargo, no debemos confundir la frustración con la derrota. ¿Nos enfadamos porque nos sentimos frustrados? ¿Estamos angustiados? ¿Estamos tristes? Esto es normal, pero hay que aprender a ver el lado positivo. Veamos qué estrategias podemos seguir y qué podemos hacer nosotros mismos cura esta frustración que puede detenernos y hundirnos.
Identifica las metas que quieres alcanzar
Hay algunos objetivos o metas que aún no has alcanzado. Es más difícil de lo que parece, es difícil conseguir lo que queremos. Esto no es malo. Si algo es difícil, valdrá la pena. Cuando alcancemos nuestra meta, nos sentiremos más felices de haberlo logrado.
Antes de que aparezca la frustración, averigua por qué no puedes lograr lo que te propones. Hable de ello y no reprima su frustración. ¡Enséñalo! Puede que no estés recorriendo el mejor camino para lograr lo que quieres. Tal vez es inalcanzable y no te das cuenta. Hablar de ello te puede ayudar.
buscar alternativas
Si no has podido alcanzar una meta, busca otra. Tal vez te estés proponiendo sueños imposibles hacer por las circunstancias en las que te encuentras. Busca algo que esté dentro de tus posibilidades, que puedes conseguir. es muy importante que te sientes motivado para hacerlo. Si quieres algo, búscalo y pon todo tu empeño en ello. Si no lo consigues, no pasa nada. Habrá muchos sueños por cumplir.
Sé realista con las metas que te propongas. No quieras lo imposible, esto solo aumentará tu frustración. Busque alternativas que sean realistas y que pueda realizar.
Acepta los obstáculos
Como dice el refrán, "la vida no es todo rosa y flores". No esperes que todo sea fácil, mejor que no lo sea. Las dificultades y los obstáculos nos ayudan a superarnos, a ser mejores. Sé positivo frente a los obstáculos y no permitas que te detengan en tu camino.
Piensa eso las dificultades son oportunidades que hay que aprovechar, no impedimentos, sino oportunidades que nos hacen crecer y avanzar.
Hay cosas que no has podido lograr, pero otras sí. Piensa en esto para encontrar fuerza. También debes entender que no puedes conseguirlo todo, pero algo sí y esto es positivo. tienes que poseer confianza y autoestima. Tienes que creer en ti mismo.
Lo que ha logrado puede darle algunas pistas. ¿Por qué has tenido éxito en esto y no en aquello? ¿Que estas haciendo mal? Tal vez pueda ayudarlo a abrir los ojos a lo que es posible y lo que no es posible.
Permítete equivocarte
Cometer errores es bueno, vamos aprende de ellos y sigue adelantede lo contrario nos congelaremos. Cambia los pensamientos de derrota con pensamientos de exito y nunca te sientas culpable por los errores. Esto solo te causará inseguridad y no te conviene. La seguridad es importante para conseguir lo que te propones.
También debemos aprender a perdonarnos a nosotros mismos por cometer errores. Creer en nosotros mismos, empezar de nuevo. Estas son cosas que deben abordarse.
No esperes nada de nadie
No idealice a nadie y no coloque expectativas exageradas en ciertas personas. Somos humanos y, por lo tanto, imperfectos. Nos frustrará ver cómo lo que esperábamos de alguien no se cumple. Si no esperamos nada de nadie, no nos sentiremos defraudados. Seremos más felices y, en consecuencia, más positivos.
Como hemos visto, es posible superar la frustración o, al menos, comprenderla. Es importante entender lo que estamos sintiendo, pero en lugar de rechazar una sentimiento negativo, aprendemos a aceptarlo y sacar el lado positivo. Lucha por lo que quieres lograr, solo aquellos que no lo intentan realmente fallan. Resiste, persiste y lo conseguirás.
Si no, no hagas nada; tal vez no fue tu oportunidad. No te desesperes. Habrá otras ocasiones en las que obtendrás lo que deseas y, sobre todo, no tengas miedo de intentarlo de nuevo. Crees que es mejor intentarlo y fracasar que arrepentirse de no haberlo intentado.