Última actualización: 09 de mayo de 2015
Las peleas matrimoniales son bastante comunes; surgen por diversas razones y pueden desencadenar fuertes conflictos. Para superar y controlar el enfado que nace en la raíz de un conflicto, es fundamental entender cuáles son tanto nuestros sentimientos como los de nuestra pareja.
¿Por qué las parejas pelean?
Antes de contarte cómo controlar las peleas de pareja o cómo afrontarlas, es importante saber por qué nos enfadamos: ¿Cuál es el origen de las discusiones de pareja?
Normalmente, las parejas discuten sobre cinco temas principales: dinero, sexo, suegros, problemas en el hogar y el trabajo, y ampliación de la familia (tener hijos).. Sin embargo, el enojo realmente se desencadena cuando uno de los miembros de la pareja siente que no recibe suficiente atención del otro; el dolor que causa esta falta de conexión es causado por la ira. En este caso, por tanto, la ira sería una representación del miedo y la angustia por miedo a no estar más en relación con el otro, una especie de mecanismo de supervivencia.
La ira y la expresión de las emociones durante la pelea
Un estudio de 2012 sobre la comunicación de las emociones durante las peleas en parejas casadas realizado por Keith Sanford, profesor de psicología y neurociencia en la Universidad de Baylor, muestra que las parejas son muy buenas para leer las emociones de su pareja durante una discusión. El problema es que el significado de estas emociones, especialmente la ira, no siempre es evidente.
Sanford encontró que, cuando una discusión se repite una y otra vez, las parejas expresan enojo durante el conflicto sin dar importancia a otras emociones que sienten y sin pensar que este comportamiento podría conducir a más problemas. Es así como esta actitud se convierte en una trampa de la que es difícil escapar.
Además, según Sanford, cuando un miembro de la pareja está enojado, es muy probable que olvide el sentimiento de tristeza que él/ella y su pareja sienten de fondo. Otros estudios previos revelan que expresar tristeza acerca a las dos partes y las ayuda a superar los litigios. Es decir, si se da a conocer la tristeza durante un conflicto, se resolverá más fácilmente. Lo complicado es notar la tristeza cuando se está bajo los efectos de la ira.
Cómo afrontar un conflicto en la pareja
Cuando las parejas tienen conflictos, es muy importante tener claro el propósito de la discusión, que la mayoría de las parejas no.
Enfadarse y provocar una discusión sin ser consciente de sus sentimientos puede provocar una explosión de ira, que se convierte en una defensa contra nuestra vulnerabilidad. Esto dificulta la comprensión de los verdaderos sentimientos que están experimentando, especialmente la tristeza, y provoca ira también en la otra mitad de la pareja. Esta situación genera un ciclo de constantes discusiones que no lleva a ninguna parte.
Sin embargo, el resultado será diferente si ambas partes de la pareja se detienen un momento para tratar de entender cuáles son los verdaderos sentimientos del otro y están dispuestas a expresar sus emociones para que pueda haber un cambio.
Imagen cortesía de Vic