Última actualización: 13 marzo, 2015
Construir una relación duradera es un verdadero trabajo en equipo, que ambos deben hacer en igualdad de condiciones para que prospere. De acuerdo con la observación y análisis de múltiples casos, debemos preguntarnos: ¿qué características generales tiene una pareja que mantiene un vínculo a largo plazo?
¿Por qué elegimos a una persona entre muchas?
¿Qué características sentimentales y físicas nos atraen? Aquí, los deseos, la biología y las necesidades personales comienzan a entrelazarse. Las experiencias vividas en la infancia tienen un gran peso en este sentido. Es durante esta fase que comienza a formarse nuestra definición personal de la palabra "amor", basada en cómo se comportaron nuestros padres entre sí, cómo nos trataron a nosotros ya sus padres.
Cuando buscamos pareja, siempre hay una referencia al mundo familiar que conocemos, porque esperamos cosas iguales o diferentes. Es muy común que la persona elegida presente rasgos que nos resultan cercanos y, al mismo tiempo, otros que aportan un porcentaje de sorpresa.
Entonces, el tiempo, la paciencia y la observación propia y ajena nos permitirán entender si las piezas encajan y si la relación funciona.
fallas
Cuando se quiere una relación duradera, pero se fracasa muy a menudo, suele haber algo mal en el criterio que utilizamos. En realidad, ¿qué necesidades estás tratando de satisfacer? En estos casos, aunque los socios elegidos tengan diferencias entre ellos, los defectos suelen ser los mismos.
Cuando la elección responde a un problema personal que no se ha resuelto, la relación está abocada al fracaso. La otra persona no puede resolver nuestros problemas personales, tenemos el poder de decidir si trabajar en ellos.
Otro escenario común es iniciar una relación sabiendo que no nos gustan algunos aspectos del otro, pero creemos que con paciencia, dedicación y amor podemos cambiarlos. Lo que obtienes, en cambio, es darle la vuelta durante mucho tiempo a algo que no nos gusta.
Dos aspectos fundamentales
La pareja que logra una relación estable que les permita aprender, crecer y disfrutar de la vida juntos, tiene dos elementos básicos:
* Emoción intelectual
* Afinidad afectiva y física
La misma evolución hace que haya algunos momentos de crisis, pero se pueden resolver y fortalecer la relación.
Métodos generales de resolución de conflictos
* Exponer los aspectos problemáticos sin criticar el otro, para favorecer actitudes constructivas y no defensivas. Ambos deben tener la libertad de expresar sus emociones de manera educada.
* Remediar o evitar el problema. Haz todo lo posible por reprimir los sentimientos negativos que generan situaciones problemáticas.
* Elige los momentos adecuados para hablar de temas importantes. Esto también significa saber controlar la ansiedad, dar un paso atrás para calmarse y reflexionar cuando una discusión comienza a animarse, proponerse tratar un tema más tarde para no hacerlo cuando se está estresado o con prisas.
* El humor es una herramienta que utilizan las parejas duraderas para relajarse y resolver conflictos más fácilmente.
Cuidar de llevar una vida interesante e independiente, no solo nos beneficia en varios sentidos, sino que ayuda a demostrar que somos capaces de enriquecer la vida de quienes deciden acompañarnos en una relación duradera.