Última actualización: 05 de abril de 2020
En las últimas décadas, la esperanza de vida de las personas ha aumentado considerablemente: vivimos más y mejor. Este es ciertamente un factor positivo, pero también trae consigo una serie de problemas de salud que antes no existían. Hablemos de la demencia senil.
El paso del tiempo, de hecho, en algunos casos puede conducir a un deterioro a nivel cognitivo que impide a la persona valerse por sí misma. La demencia es la principal causa de adicción en los países desarrollados. Pero, ¿cuál es la influencia de esta situación en la familia?
"La demencia es como ese momento de duda en el que no sé si debo confiar en los ojos o en la memoria, porque parece que ambos pueden cometer los mismos errores insidiosos".
-John Katzenbach-
Las causas de los conflictos familiares cuando un miembro sufre demencia
En todas las familias existen fuentes de conflictos diarios que se van resolviendo de mejor o peor manera, según la capacidad resolutiva de los distintos miembros. Y es que, cuando uno de ellos sufre demencia, aumentan los motivos de discusión y conflicto.
Esto se debe al hecho de que La demencia implica la aparición de numerosos estresores que antes no existía. En primer lugar, a menudo hay una falta de información sobre la enfermedad. Es igualmente difícil determinar cuál será su evolución, lo que genera gran incertidumbre entre los familiares.
"La demencia devora el pensamiento del paciente y al mismo tiempo destruye los sentimientos de las personas que lo aman y lo cuidan".
-Nolasco Acarín Tusell-
Por otro lado, la atención que necesita una persona con demencia suele implicar un gasto económico importante, ya que puede ser necesario contratar a una persona para que lo cuide, llevarlo a un centro de día especializado o internarlo en una casa de acogida. Los conflictos también pueden surgir por la falta de tiempo disponible para cuidar a otros miembros de la familia.
Finalmente, uno de los principales motivos de discordia es cómo cuidar a la persona con demencia. Algunos familiares pueden sentir que los demás no están tomando las decisiones correctas o que solo están tratando de satisfacer sus propios intereses.
¿Por qué es difícil resolver un conflicto cuando un familiar tiene demencia?
Ahora que hemos analizado las principales fuentes de conflicto, es necesario comprender por qué estos problemas a menudo se prolongan y no se resuelven. Sólo así podremos aprender a hacerlo. La razón principal que te impide encontrar una alternativa que satisfaga a todos es la falta de comunicación entre los distintos miembros de la familia.
Este bloqueo hace que algunos miembros de la familia tengan dificultades para expresar cómo se sienten y qué piensan sobre la demencia. Además de ser difícil, para algunos puede ser completamente imposible. Pero no solo: pueden tener miedo de pedir ayuda a otros por temor a una discusión.
Por otro lado, los niños pueden haber tenido problemas en el pasado con el padre que ahora está enfermo. Esto puede generar sentimientos de culpa y hacerlos reaccionar de manera más agresiva hacia otros miembros de la familia. Al final, puede haber una especie de "competencia" entre hermanos sobre quién es mejor para cuidar al padre enfermo.
¿Qué se puede hacer para resolver los conflictos relacionados con la demencia?
Cuando un miembro de la familia se ve afectado por la demencia, la situación sin duda será difícil de manejar para todos. Pero es posible minimizar la aparición de los conflictos que acabamos de ilustrar. Para ello, es importante cambiar todas aquellas dinámicas nocivas que afectan al proceso.
Desde este punto de vista, es vital trabajar la comunicación. Poder expresar nuestras emociones y opiniones respecto a la enfermedad nos ayudará a resolver diversas disputas. Por otra parte, no debemos olvidar que todo esto será mucho más fácil cuanto más unido sea familia. El apoyo, compromiso y colaboración entre los diferentes miembros es fundamental.
“Él pide una mano que sostenga la suya, un corazón que lo cuide y una mente que piense por él cuando no pueda. Alguien que lo proteja en su viaje a través de las peligrosas trampas del laberinto".
-Diana Friel-
Ser capaz de adaptarse con flexibilidad a los cambios en los roles y hábitos familiares garantizará que haya más apoyo en el cuidado personal. Por último, es importante poder tomar decisiones específicas. Todo esto ayudará a que la familia se adapte a la demencia y sufra menos la enfermedad.
Imágenes cortesía de Cristian Newman, Tiago Muraro y Alex Boyd.
