Última actualización: 03 de febrero de 2015
El amor es una cosa hermosa. Todos tenemos una película favorita en la que los dos protagonistas se juran amor eterno y luchan contra innumerables obstáculos para poder cultivar el amor de su vida y ser felices para siempre. Sin embargo, en realidad, el amor no es así en la vida cotidiana.
el gran error
Las relaciones son geniales, pero si comienzas a envidiar las relaciones de los demás o si descubres que te has puesto límites a ti mismo que antes no existían (cómo vestirte, a quién ver, etc.), probablemente hayas caído en una relación. tóxico. Las relaciones tóxicas son más frecuentes de lo que pensamos porque en series de televisión, películas y hasta revistas nos dicen que cuando amas de verdad a alguien “lo aguantas todo, lo aceptas todo, todo está bien” porque sino no es amor verdadero, pero esto es un ERROR GRAVE.
Pensar que sin esa persona “tu vida no tiene sentido” es peligroso. Una relación en tal perspectiva puede socavar tu autoestima y permitir que la otra persona imponga límites en tu vida. Hacer bromas pesadas que hagan sentir mal al otro, ser emocionalmente frío o manipular al otro diciendo frases como "es lo mejor para ti" entran en esta categoría.
Si te estás identificando con este perfil, no te asustes: lo importante es que ahora que lo conoces puedes echarte atrás.
¿Cómo salir de una relación tóxica?
- Lo primero es darse cuenta. Es importante que seas consciente de que en realidad tu pareja no te esta dejando libre y en lugar de ayudarte a mejorar te esta "orientando" como si fueras incapaz.
- Segundo, valórate a ti mismo. Reconoce que eres una persona llena de virtudes y rasgos valiosos simplemente por ser tú mismo. Tienes sueños y la persona a tu lado debe apoyarte en alcanzarlos y ser tu pareja, no un obstáculo más a superar.
- El tercer punto es Se independiente. No necesitas a nadie. Tienes todo lo que necesitas en ti, todo lo que necesitas y puedes querer de la vida. está en ti mismo. Tus sueños, tu vida y tus deseos dependen de ti. Repítelo tantas veces como sea necesario, quizás frente al espejo.
¿Qué pasa si no se puede arreglar?
Si no hay forma de hacerle entender a tu pareja que eres una persona con identidad propia y que no tiene por qué limitarte y obligarte a pensar diferente, Si no puede dejar de hacerte sentir mal con sus subestimaciones, ¡entonces huye! Lo más importante es que en estos casos te alejes por completo y cortes toda relación para tener el tiempo suficiente para sanar las heridas que te ha dejado esta historia. Es posible que te enfrentes al síndrome de abstinencia, pero concéntrate y observa si tu ansiedad e inseguridad han disminuido y ya no hay nadie que te subestime.
Piénsalo y despréndete poco a poco, siempre recordando todo lo que te hizo sentir mal en tu relación. Si esto resulta ser más que buenos momentos, acaba de tomar la decisión correcta.