Las expectativas excesivas pueden crear serios problemas para la estabilidad de una relación romántica. Son una verdadera trampa que es mejor evitar.
Última actualización: 30 agosto 2022
Las relaciones son, sin duda, uno de los aspectos más importantes de la vida. Quizás por eso a menudo causan algunos dolores de cabeza. Pero, ¿por qué tantas personas terminan enredándose en complicadas y asfixiantes historias de amor? Una de las principales razones se refiere a las expectativas que, a la larga, se convierten en una verdadera trampa.
Seguro que tú también tendrás una idea de cómo podría ser una historia de amor perfecta. En la mayoría de los casos, sin embargo, tendemos a abandonar la esfera de la realidad, imaginando e idealizando a la pareja no por lo que es, sino por cómo queremos que sea. Termina creando un elevado número de expectativas que, inevitablemente, no se cumplen. Repetidamente.
Cuando una historia comienza a tomar vuelo, la imaginación puede descontrolarse, provocando desilusión y amargura.. Hasta que llega el desamor, ese es el momento en que se hace evidente la errónea comparación entre "ideal" y "real". Ante esto, muchas personas deciden tirar la toalla, ya que no aceptan renunciar al sueño que han creado.
Porque las expectativas causan problemas
Algunos comportamientos humanos pueden causar dolor y sufrimiento. Albert Ellis, el padre de la terapia emocional racional, dijo que lo que causa el dolor no es lo que sucede. Por el contrario, la culpa es de lo que nos decimos a nosotros mismos sobre lo sucedido.
Tan pronto como comenzamos una nueva relación, sabemos exactamente cómo queremos que sea. Pero si nuestra nueva pareja empieza a defraudar nuestras expectativas, aunque sea en lo más mínimo, nos producirá mucha ira y frustración. Y luego habrá pensamientos negativos como: "¡No puedo más, no puedo soportarlo!" o "Está actuando raro, ha cambiado".
Con solo un ejemplo trivial, está claro que las expectativas son una trampa peligrosa para cualquier relación. El problema se complica porque nuestras expectativas muchas veces quedan en secreto, es decir, no se comparten con la pareja. Desafortunadamente, la mayoría de la gente "espera" que la otra persona comprenda por sí misma cómo debe comportarse. Y esto inevitablemente complica las cosas.
El verdadero arrepentimiento se activa tan pronto como se rompen las expectativas, nos preguntamos por qué comenzamos esta relación.. Pero ¿es realmente necesario? ¿Existe alguna alternativa a este comportamiento, tan inútil y perjudicial para nuestro bienestar?
Evitar las consecuencias negativas de las expectativas
Aquí hay algunos consejos que nos permitirán mantener la trampa de las expectativas fuera de nuestra relación:
1- Sé más flexible
A veces parece que buscamos pareja siguiendo la lista de la compra. Establecemos a priori una serie de requisitos que la otra persona debe cumplir a toda costa, demostrando una rigidez que, sin embargo, no utilizamos ni siquiera con nosotros mismos. Esto es muy injusto. El problema es que los humanos rara vez son perfectos, por lo que es casi imposible que alguien cumpla con las expectativas creadas en torno a una pareja ideal.
Dejemos de intentar encontrar a alguien 100% perfecto, no existen. En cambio, intentemos vivir el momento con un poco más de naturalidad. Tener expectativas está bien, pero debemos asegurarnos de que no sean demasiado rígidas y centrarnos en aquellos aspectos que son realmente importantes para ti.
2- Explica lo que no es negociable
Sin embargo, lo dicho hasta ahora no significa que tengamos que estar satisfechos. Por el contrario, es fundamental preguntarnos qué es lo que realmente queremos, exponiendo nuestras limitaciones (y reconociendo nuestras carencias). Después de identificar aquello a lo que no estamos dispuestos a ceder, es hora de hablarlo con tu pareja.
De esta manera, él sabrá exactamente lo que nos está molestando. Será mucho más fácil evitar discusiones y peleas. Y, casi por arte de magia, lo que considerábamos problemas insalvables desaparecerá, dando una nueva oportunidad de crecimiento a la relación.
3- Pedir al compañero que nos cuente sus faltas
También es muy bueno conocer el punto de vista del otro. Para que la relación sea verdaderamente funcional, debemos descubrir y ser conscientes de los defectos y limitaciones de la persona que está a nuestro lado. La forma más fácil de hacer esto es, por supuesto, usar el diálogo.
Desafortunadamente, no todos son honestos acerca de lo que es realmente importante para su bienestar. Por lo tanto, si ves que tu pareja titubea o no puede decirte lo que necesita y lo que realmente le molesta, debes ayudarlo a hacerlo. Solo conociendo sus puntos de conflicto podrán evitar juntos los problemas creados por las expectativas que pueden atrapar la relación.
