Última actualización: 27 septiembre, 2020
lainfidelidad emocional o afectivo, o la traición del compañero que, sin embargo, no ha tenido relaciones sexuales con otra persona, puede ser más dañina que la infidelidad física.
Muchas veces pensamos que la infidelidad solo existe cuando la pareja ha tenido relaciones sexuales con otra persona. Por el contrario, esto generalmente se manifiesta cuando se rompe un acuerdo. En resumen, la infidelidad emocional provoca un deterioro en la relación de pareja en un porcentaje mayor que el físico.
¿Qué es la infidelidad emocional?
La infidelidad emocional ocurre cuando la pareja vive momentos íntimos con otra persona, cada vez se produce un intercambio emocional y se rompe un acuerdo implícito o explícito. Durante estos momentos íntimos, puede tener lugar un intercambio emocional.
Se habla de infidelidad emocional incluso cuando no hay intercambio, pero la pareja se ha enamorado de otra persona, aunque no lo diga.
En muchos casos, la infidelidad emocional precede a la infidelidad física, ya que permite establecer un vínculo profundo. En algunas circunstancias, la pareja se deshace por culpa de la persona infiel, que no está interesada en llevar una relación sin afecto.
Causas de la infidelidad emocional
¿Cómo llegamos a la infidelidad emocional? Las causas son diversas, pero generalmente se da como consecuencia de la falta de afecto en la pareja, que se deteriora de una forma u otra. Ahí la falta de afecto, intimidad o confianza lleva a encontrarlos en otro lugar, para que uno de los miembros de la pareja (a veces los dos) los busque en otra persona. Una inclinación comprensible, pero que también denota una profunda incomunicación.
Una relación sana rara vez se verá amenazada por un fracaso emocional. En una pareja sana, los canales de comunicación permanecen abiertos y ninguno tendrá miedo de confesar insatisfacción o malestar. Esto significa que la causa raíz de la infidelidad emocional radica en las habilidades de comunicación de uno.
Cómo evitar la infidelidad emocional
Trabajar en el aspecto comunicativo de la pareja es fundamental. Una pareja sólida debe trabajar la confianza, la amistad y la comprensión día tras día. La pareja está formada, ante todo, por dos amigos que deciden compartir su vida y que, además, sienten atracción sexual el uno por el otro.
Dado que la infidelidad emocional no incluye las cuestiones sexuales, no debemos buscar aquí la causa raíz de la traición. Las relaciones sexuales pueden ser plenamente satisfactorias y aun así la infidelidad puede manifestarse. Aunque, como ya se ha apuntado antes, la persona infiel puede acabar interesándose sexualmente por la tercera persona.
¿Qué hacer en caso de infidelidad emocional?
Los signos de infidelidad afectiva varían según la pareja, pero se pueden identificar los siguientes:
- Uno de los miembros de la pareja es distante y no participa de las emociones y problemas del otro.
- No comparte lo que le pasa.
- Falta de intimidad y afecto en la pareja.
Recuerda que no presentar a tu pareja a todas las personas que conoces o no hablarle de todo lo que haces con ella no constituye infidelidad: es necesario que ambos miembros tengan experiencias comunes e íntimas fuera de la pareja. En caso de que la pareja hable de sus problemas con otra persona y no con nosotros, hay un problema. Necesitamos hablar de ello y profundizar en la cuestión.
Infidelidad atestiguada, existen dos soluciones: continuar o terminar la relación. Para tomar un camino o el otro, es necesario encontrar un momento para hablar con la verdad; no importa si la decisión es una de las dos.
Si la persona infiel no quiere romper, es importante que comprenda que debe abandonar su forma de relacionarse con la tercera persona y recuperar el equilibrio de la pareja. Y, en todo caso, someterse a este proceso dependerá de la voluntad de la persona traicionada.