Última actualización: 21 septiembre, 2018
En la intimidad que ofrece la intimidad se hacen realidad algunos de los deseos más bellos y placenteros. La imaginación, las fantasías y las angustias sólo se confiesan a la luz de la vela de la confianza y en un ambiente libre de prejuicios.
En una pareja, la intimidad es un aspecto muy importante. Aunque pueda pensarse que este término se refiere únicamente al ámbito sexual, en realidad implica otras cuestiones, como la confianza, la complicidad o saber lo que quiere el otro..
En esta ocasión, nos centraremos en la rutina sexual, en lo que sucede en el dormitorio (o en cualquier otra estancia de la casa, porque sabemos que la pasión no tiene tiempo ni lugar). Si quieres mejorar la intimidad con tu pareja, quizás sea el momento de esforzarte un poco para conseguirlo.
Recuerda que la primera condición sine qua non es que ambas personas involucradas en la relación estén de acuerdo en la necesidad de hacer cambios para mejorar la relación.. Si uno de los dos no siente las ganas en un momento determinado, está muy cansado o ese día prefiere hacer otra cosa, quizás haya que esperar hasta que ambos lleguen a una armonía.
La intimidad en el sexo tiene que ver con diferentes aspectos, desde el placer hasta los sentimientos del otro hasta cómo uno se siente en ese momento.. No se trata de lo que le gusta a un hombre oa una mujer, sino de encontrar un punto de encuentro donde ambos se sientan bien.
Para mejorar la intimidad en la pareja, uno de los pasos fundamentales es prestar atención a lo que uno está sintiendo y, al mismo tiempo, interesarse por lo que siente la otra persona.. ¿Crees que es imposible? ¡Por supuesto que no!
Mejora la intimidad con tu pareja
Como dicen, una cosa es hacer el amor, otra es tener sexo y la misma distinción se aplica a la pasión y el romance. Ambos son aspectos muy importantes para la pareja y potencian la experiencia íntima.
El contacto visual durante el coito es fundamental para aumentar el nivel de complicidad y también para saber lo que siente la otra persona. Si normalmente cierras los ojos para obtener más placer, te estás perdiendo una cosa vital: observar a tu pareja. No tienes que hacerlo todo el tiempo, pero tienes que encontrar un equilibrio.
Recuerda que el coito es una manera perfecta de encontrar una conexión con la persona que has elegido.
Quizás en esos momentos el tacto es el sentido más importante, pero hay otros, como la vista, el oído, el olfato e incluso el gusto, que a menudo pueden aumentar la excitación y el placer de una forma nunca antes experimentada..
Así, la intimidad no es sólo un lugar para tener sexo, sino también un lugar para hablar de ello. Si hablas de cualquier cosa con tu pareja, ¿por qué no hablar de sexo??
Nadie tiene el poder de leer la mente de los demás y hay cosas que, si no se ponen en palabras, nunca se comunicarán. En muchas ocasiones la pareja estaría encantada de complacerte, quiere hacerlo, pero será difícil que lo haga si no aprovechas la intimidad para hacer posible la comunicación..
¿No es una pena?
Por otro lado, algunas personas sienten más vergüenza de mirar a los ojos a su pareja durante la intimidad que de quitarse la ropa, es como si de esta manera se sintieran realmente expuestos y frágiles. Una fragilidad que por la razón que sea desencadena miedo.
Superar este sentimiento puede resultar en una comunicación maravillosa donde permites que la realidad y tu pareja te den mucho más de lo que pensabas.
Muchas veces, sin saberlo, somos nosotros mismos los que encadenamos nuestro placer.
Ya que estamos abordando el tema del miedo y la inseguridad, una de las formas de aumentar la intimidad con tu pareja es permitirle que "te vea". Son especialmente las mujeres las que tienen complejos con su cuerpo, por lo que piden apagar la luz o evitar posiciones que puedan hacerlas sentir más vulnerables..
Como cualquier otro aspecto de la relación de pareja hay que profundizar para fortalecerse, lo mismo ocurre con la esfera sexual. Este proceso de crecimiento pasa por la intimidad, que a su vez pasa por la confianza.
Un fideicomiso que, como los mejores platos, necesita mucho tiempo y no siempre se lo damos. Es una inversión que muchas veces despreciamos o que esperamos desarrollar por sí sola, cuando en realidad es imposible que suceda si es la última de nuestras prioridades.
De hecho, no hay nada de malo en planificar momentos íntimos. Esta debe ser la práctica cuando hay una conciencia de que no pueden ocurrir espontáneamente.
Lo mejor de todo es que tu día a día se beneficiará mucho porque, como te hemos adelantado, la intimidad en la pareja no solo tiene que ver con el ámbito sexual, también significa conocerse, entender lo que el otro es. persona desea, agradarle y dejar que te satisfaga, así como buscar (y encontrar) lo que agrada y agrada a ambos.