Última actualización: 18 de febrero de 2022
Mimar es una de las palabras más dulces de nuestro idioma. y más aún la acción que simboliza: “acariciar con el alma”.
Un mimo es más que un abrazo combinado con un lindo momento, designa complicidad, un encuentro emocional, algo que va más allá del mero contacto de afecto. Quizás para algunos de nosotros acariciar con el alma tenga este significado, pero otros, sin embargo, pueden atribuir mayor o menor intensidad a su definición.
Acariciar con el alma: llenarnos de emociones
Podemos seducir a través de las palabras y las caricias más allá del contacto directo con la piel, los sentidos tradicionales, el renacimiento sentimental y la reacción a nuestras emociones. Mucho se ha escrito sobre los sentimientos, pero al final cada quien tiene que pensar, sentir y validar los suyos.
Somos seres emocionales que pensamos a través del lenguaje de las emociones y, por tanto, sabemos que tanto abrazar como mostrar nuestro cariño a los demás es uno de los mejores regalos que podemos dar.
Porque sentirse acariciado con el alma significa experimentar la unión de nuestras emociones. Los problemas desaparecen por unos segundos, la angustia se deja envolver por el amor y por unos instantes unimos nuestras constelaciones con las del otro.
Lo que llamamos metafóricamente "la unión de dos almas" se convierte en una danza química a nivel cerebral. Nuestras emociones se unen sutilmente en forma de dopamina, serotonina, oxitocina y noradrenalina.