Última actualización: 09 septiembre, 2015
Es posible que hayas experimentado este sentimiento más de una vez en tu vida. La sensación de que no puedes seguir, de que nadie te dejará conseguir lo que quieres; porque te cortan las alas o te atan a cadenas que no te permiten escapar de su esfera de control.
El crecimiento personal requiere oportunidad y confianza en uno mismo, coraje y voluntad propia. Con frecuencia padres o profesores son figuras que ejercen su poder cortando las alas.
Hay modelos educativos en los que se castra la curiosidad natural de los niños, se encierra su mente en parámetros preestablecidos, en los que no hay lugar para la espontaneidad y la creatividad. Terminamos educando alumnos iguales y estandarizados, de mentalidad rígida, que no puede adaptarse a un mundo complejo como el que vivimos.
No solo se da el caso de padres y maestros que limitan el crecimiento personal de los niños. A veces, las tijeras que cortan las alas se encuentran en las manos de nuestro compañero.: vivimos relaciones que, lejos de permitirnos crecer y madurar como personas, nos quitan la libertad y bloquean nuestras aspiraciones. Este es un tema muy complejo que merece ser comentado.
Las barreras para el crecimiento personal.
¿Cómo se puede definir el crecimiento personal? Pasa a sentir una cierta inquietud dentro de nosotros, que toma la forma de vacío y esperanza al mismo tiempo.. Las personas rebosan de metas, proyectos y aspiraciones con las que se desafían a sí mismas para sentirse capaces, útiles y valiosas.
No siempre se trata de grandes proyectos, a veces solo queremos sentirnos bien, independientes, valientes y confiados. Sin embargo, el círculo social que nos rodea ejerce un peso considerable sobre estas dimensiones.
¿Cuáles son las principales barreras para el crecimiento personal? ¿Cómo podemos ganarlos?
- Desconfianza (tanto hacia los demás como hacia nosotros mismos). esto es un circulo vicioso: pensemos en esos padres sobreprotectores que construyen una barrera tras otra, con la esperanza de que el niño permanezca siempre unido a la familia.
Hacen todo lo posible para mantenerlo dependiente, lo que lo frustra en el trabajo. Levantan muros, le cortan las alas día tras día, le hacen creer que no es una persona hábil. Es un riesgo muy alto.
- Inseguridad. Es curioso ver cómo personas que viven de forma dinámica e independiente crean de repente relaciones en las que su personalidad cambia. El control por parte de la pareja es adictivo, que se convierte en miedo e inseguridad. Son relaciones tóxicas, en las que se aniquila por completo el crecimiento personal.
- La pérdida de control. En el momento en que sentimos que nos están cortando las alas y, al mismo tiempo, lo permitimos, es donde perdemos todo el control de la situación. ¿Por qué lo hacemos? ¿Por qué permitimos que otros construyan muros a nuestro alrededor, bloqueando nuestro crecimiento personal?
A veces es por miedo, otras veces por cariño, por un amor tóxico del que dependemos y del que no podemos separarnos. También puede ser por falta de voluntad, porque llevas demasiado tiempo viviendo en tu zona de confort, y allí todo es seguro y predecible. Estos factores deben tenerse en cuenta.
No dejes que nadie decida por ti, ni limite tus aspiraciones. Lo que sientes por dentro debe actuar como un estímulo para rebelarte. El crecimiento personal requiere coraje y voluntad de buscar el viento que finalmente te hará navegar.
Busca en tu océano, enciende tus motores y dale la espalda a aquellos que quieren cortarte las alas. Recuerda que quien quiera tenerte bajo su control hará todo lo posible por convencerte de que te ama, que te da y te dará siempre lo mejor, pero no es cierto.. Los que aman de verdad no imponen ni hieren, sino que comprenden y abren el camino para que avancen juntos, con confianza.
