Última actualización: 28 de enero de 2018
Los proverbios japoneses son conocidos en todo el mundo. En Japón son auténticos principios rectores en la vida cotidiana y desde allí han traspasado fronteras. Tal vez tú también los conozcas, pero no sabías nada sobre sus orígenes.
La mayoría de los proverbios japoneses tienen su origen en las zonas rurales. Muchos, de hecho, se refieren a las bellezas de la naturaleza. Te invitan a reflexionar sobre lo que aprendes del sol, el agua, el río y hasta las piedras. Todos los proverbios tienen un maravilloso matiz poético. De hecho, también han sido retomados en los campos filosófico y religioso.
Los proverbios japoneses son muy enigmáticos. Dado que las culturas orientales son muy discretas, la mayoría de los proverbios se componen de pocas palabras y dejan mucho espacio para la imaginación. Hoy queremos compartir contigo 10 fantásticas perlas de sabiduría oriental.
Incluso el viaje más largo comienza con el primer paso.
Proverbio chino
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Proverbios japoneses sobre la acción.
Varios proverbios japoneses se centran en la actuación. Para los orientales, la actividad no es impulsividad ni obsesión. Pensamiento y acción van de la mano, uno completa al otro. Esto es lo que dicen los japoneses: “Si piensas, decide. Si lo has decidido, no lo pienses".
El concepto japonés de velocidad surge perfectamente de estas palabras: "Rápido significa lento, pero sin pausas". Claramente vemos que para esta cultura la velocidad tiene más que ver con la eficacia que con la acción precipitada.
Muchos piensan erróneamente que las culturas orientales son pasivas. Este absolutamente no es el caso. Ven la acción desde una perspectiva diferente.. No es extraño, por tanto, que los proverbios japoneses inviten a la acción, pero que al mismo tiempo establezcan un límite a la acción misma. He aquí un ejemplo: "Haz todo lo que puedas, deja el resto al destino".
Bondad hacia los demás
Los japoneses tienen un profundo sentido del grupo, casi como si fuera un lugar sagrado. Muchas tradiciones orientales preservan el respeto y la consideración por los demás. Por eso valoran profundamente expresiones como: “Una palabra amable puede calentar tres meses de invierno”.
El respeto por los demás surge en muchos proverbios. “Revisar siete veces antes de acusar a una persona”: hay que evitar disparar juicios precipitados sobre los demás.
La actitud tranquila de los orientales se confunde a menudo con falta de pasión. No es tan. De hecho, los japoneses son individuos muy apasionados y alegres. Este proverbio, por ejemplo, da un gran valor a la felicidad: “La felicidad llama a la puerta de los que ríen”. La risa trae armonía y la armonía trae felicidad.
Proverbios japoneses sobre caminos de crecimiento personal.
El sentido de comunidad y cooperación de los japoneses queda perfectamente reflejado en este proverbio: “El sol no conoce el bien, el sol no conoce el mal. El sol ilumina y calienta a todos por igual. Quien se encuentra a sí mismo es como el sol...": una identidad sólida se refleja en la aceptación de los demás y del mundo.
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Otro proverbio japonés dice: “Si haces preguntas, te avergonzarás por un minuto; si no lo haces, sentirás vergüenza toda tu vida”. ¡Cuánta sabiduría en estas palabras! La sociedad japonesa es muy reservada, pero, como dice el refrán, la discreción tiene un límite.
La lentitud y la espera
Japón tiene un pasado milenario a sus espaldas. La comunidad oriental ha aprendido a comprender y valorar el paso del tiempo, sabe que las cosas más importantes y genuinas de la vida necesitan tiempo. "Los ríos profundos fluyen lentamente", en otras palabras, todo lo que tiene profundidad, se manifiesta gradualmente.
Los japoneses saben que la paciencia es una virtud determinante. Han experimentado personalmente que el éxito o el fracaso depende en gran medida de la paciencia. y afirman que "la victoria es de quien espera media hora más que su oponente". Esto significa que el éxito llega a aquellos que saben ser pacientes.
Aquí hay una pequeña colección de algunos de los proverbios japoneses más conocidos. Hay cientos de ellos que merecen ser mencionados. Tenemos mucho que aprender de esta cultura que se ha distinguido en numerosas ocasiones a lo largo de su historia, demostrando que uno puede resurgir de sus cenizas cuando la realidad lo requiere.
