Última actualización: 18 de febrero de 2016
La vida es corta y no podemos permitirnos el lujo de rechazar los momentos que nos permiten disfrutarla y dejar de lado nuestras mayores pasiones. Evidentemente, trabajar es fundamental y lleva mucho tiempo, así como está claro que las tareas domésticas, familiares y las relaciones afectivas ocupan gran parte de nuestra vida.
Sin embargo, también es cierto que para llevar una vida plena nunca debemos permitirnos no tener tiempo para dedicarnos a nosotros mismos. Hay una forma especial de entrar en contacto con lo que más nos gusta y que nos permite hacer una excepción a las reglas del día a día: dedicarnos a nuestra pasión.
“Las pasiones son la válvula de escape de la vida cotidiana y el consuelo del paso del tiempo”.
(María Roberts Rinehart)
Las pasiones son pequeños reinos de libertad.. El tiempo que les dedicamos es nuestro verdadero tiempo libre, aquel en el que hacemos lo que realmente nos gusta sin ánimo de obtener una ganancia económica o cumplir una obligación.
Los beneficios de cultivar una pasión
Médicos, psicólogos y todos los profesionales de la salud coinciden en que tener una pasión aumenta la calidad de vida. Es un factor de equilibrio y ayuda a preservar la salud física y emocional. Entre los principales beneficios de cultivar una pasión se encuentran los siguientes:
- Permite desarrollar habilidades y talentos innatos, así como introducir nuevas potencialidades;
- Ayuda a desconectarnos de la rutina. y otras actividades que pueden ser estresantes;
- Es un excelente antídoto contra la depresión, la ansiedad y el nerviosismo, ya que ayuda a conseguir un estado de ánimo más tranquilo;
- Afecta el desarrollo de la creatividad y la capacidad de autodisciplina;
- Te permite expandir tu vida social;
- Aumentar la motivación para enfrentar los problemas de la vida;
- Fortalecer la autoestima, facilita la planificación de nuevas metas y ayuda a mejorar constantemente;
- Ayuda a aprovechar los momentos de soledad, es decir, en compañía de uno mismo;
- Libre de obsesiones causados por trabajo, deudas, problemas de pareja, etc.
De todos estos beneficios, el más importante es que una pasión nos ayuda a reconocer las partes más genuinas de nosotros mismos. Es cuando cultivamos una pasión que somos verdaderos, porque no tenemos la ansiedad del resultado y porque no tenemos que demostrarle nada a nadie, ni siquiera a nosotros mismos.
Algunos consejos para disfrutar de una pasión
Seguro que todos tendréis en mente alguna actividad que os gustaría realizar en vuestro tiempo libre. Sin embargo, no siempre logras hacer realidad este deseo o lo haces solo de vez en cuando. La vida moderna absorbe mucha energía y te lleva a olvidarte fácilmente de ti mismo. Por eso, es bueno considerar algunos puntos para hacer de la pasión que tienes un tesoro que enriquezca tu vida:
- Tal vez te gustaría cantar, pero todos te dicen que estás desafinado. Sin embargo, dado que tu objetivo no es convertirte en un tenor como Pavarotti, ¿por qué no intentas cantar como pasatiempo? Por muy desafinado que estés, con un poco de técnica podrás mejorar mucho. Lo único que realmente importa es que te guste y lo disfrutes.
- No cultives solo la pasión en la que eres hábil. Busca actividades relacionadas con ella y, por qué no, también otras que apenas conoces. Puede que te sorprendas de tus virtudes ocultas, que solo estaban esperando el momento adecuado para emerger.
- No postergues y no te rindas por factores externos.. El momento adecuado es ahora. No permitas que tus responsabilidades, presiones familiares o compromisos acumulados te impidan practicar tu pasión. Este es un período de tiempo tan importante como el de los deberes diarios. Es un instante para ti y, por eso mismo, es sagrado. La práctica de una pasión siempre se refleja en un mayor compromiso laboral, familiar, social, etc.
- Aléjate de tu núcleo social habitual. Es bueno crear un punto de quiebre con todo lo que representa tu rutina. No tiene sentido que tu pareja, tus compañeros de trabajo o un miembro de tu familia participen en la realización de tu pasión. Es un tiempo diferente, de exploración, de libertad.
- No dependas del dinero. Tal vez estés buscando pasatiempos demasiado caros, lo que se convierte en una excusa para nunca practicarlos. Puede ser que te guste escalar, pero no tengas el material adecuado, o que salir de la ciudad sea demasiado caro… Y así todo queda en forma de proyecto. Si, en este momento, no puede permitirse el lujo de practicar una de estas costosas pasiones, busque otras similares más baratas.
Imágenes cortesía de Pascal Campion
