A lo largo de nuestra vida pasamos por diversas circunstancias que nos generan estrés. Sin embargo, hay ciclos de vida que pueden resultar especialmente complejos si no contamos con las herramientas psicológicas necesarias para afrontar los retos que conllevan.
Un equipo de psicólogos de la Universidad Estatal de Pensilvania pasó a la década de 1990 para evaluar los niveles de estrés de varias generaciones a lo largo del tiempo. Descubrieron que, de hecho, el nivel de estrés moderno es más alto que hace tres décadas, pero nos afecta con mayor intensidad en una etapa específica de la vida.
¿Cuál es la fase más estresante de la vida?
Estos investigadores analizaron a más de 2.000 adultos nacidos en diferentes momentos para comprender cómo habían evolucionado sus niveles de estrés a lo largo de los años. Observaron tanto la frecuencia con la que estas personas experimentaban estrés como la importancia personal que atribuían a los factores estresantes.
Descubrieron que, en promedio, los participantes informaron aproximadamente un 2% más de factores estresantes durante la última década que en el pasado, lo que se traduce en una semana adicional de estrés por año.
Pero el hallazgo más interesante de este estudio es que las personas de mediana edad reportaron niveles de estrés más altos, exactamente un 19% más que en 1990. Esto se traduce en 64 días más de estrés que cuando eran más jóvenes.
¿Por qué estamos más estresados en la mediana edad?
Muchas de las personas que participaron en el estudio sintieron que la vida se había vuelto más caótica, incierta y menos segura en los últimos tiempos. Esto los hizo más preocupados y ansiosos. De hecho, estaban aún más preocupados de que el estrés pudiera afectar sus finanzas y planes futuros.
En esencia, la incertidumbre económica se cernía sobre la vida de las personas de entre 45 y 64 años, generando tensiones y preocupaciones para ellos, mucho más que para los adultos jóvenes. Probablemente esto se deba a que las personas mayores de 50 años se enfrentan a un mercado laboral incierto que las excluye gradualmente y, al mismo tiempo, cargan con muchas más responsabilidades sobre sus hombros que cuando eran más jóvenes.
A medida que entramos en la mediana edad, tendemos a ser responsables de muchas personas, lo que puede convertirse en una carga difícil de soportar. A menudo, seguimos siendo responsables de nuestros hijos, que todavía no trabajan por cuenta propia, pero es posible que también necesitemos ayudar a los padres de edad avanzada y también podemos ser responsables de una serie de empleados en el trabajo.
Este nivel de responsabilidad puede asumir un mayor nivel de estrés que en otras ocasiones, especialmente cuando percibimos que vivimos en un mundo más impredecible y contamos con pocas redes de apoyo. Es por eso que la mediana edad puede ser el momento más estresante de la vida. Y no es exactamente el tipo de estrés "positivo", sino más bien un malestar que puede terminar poniendo a prueba nuestra salud, especialmente cuando dura muchos años.