Detener la charla mental es fundamental para liberarnos de la tensión y el estrés y para alcanzar la paz interior. Estos sencillos ejercicios te ayudarán a no pensar.
Última actualización: 17 2021 noviembre
El arte de no pensar, ¿cuántas veces hemos querido pausar nuestros pensamientos? ¿Cuántas veces hemos querido parar nuestra mente, darle al botón de pausa y disfrutar de unos minutos de paz?
Es un deseo compartido por muchas personas, especialmente con tendencia a la ansiedad; esto se debe a que pueden sentirse abrumados por pensamientos intensos y constantes que los empobrecen psicológicamente.
Pensar demasiado puede ser una gran carga y una limitación importante en muchas áreas de la vida. No solo nos sumerge en la duda y la indecisión perennes, sino que también eleva nuestros niveles de estrés y dificulta nuestras relaciones sociales.
¿Es posible el arte de no pensar?
Tan agotador como la charla mental puede ser, no pensar en nada es practicamente imposible.
Sin embargo, es posible centrar la atención en un aspecto especÃfico, de modo que puedas cambiar la actividad de la corteza cerebral y asà descansar un poco.
Uno trata de lograr esto con prácticas como la atención plena o la meditación. Cuando se invita a una persona a liberar su mente, en realidad se le insta a regular el flujo del pensamiento, a enfocarlo deliberadamente y dejar pasar todas las ideas intrusivas que aparecen durante la práctica de este ejercicio.
Para la mayorÃa de nosotros, no es fácil. Vivimos en una sociedad agitada, en un ambiente lleno de estÃmulos, y nos hemos acostumbrado al contenido de nuestra mente frenética y caótica.
Sin embargo, podemos realizar algunos ejercicios sencillos para ralentiza esta actividad y redescubre la anhelada paz interior.
Ejercicios que ayudan a no pensar
Respiración consciente
Una de las prácticas más útiles para los nuevos en el arte de no pensar, ya que es relativamente fácil de implementar. El objetivo es inhalar y exhalar con cierta cadencia, de modo que se presta toda la atención al flujo de aire que entra y sale del cuerpo
Antes de proceder con la respiración consciente, necesitas encontrar un lugar tranquilo para estar solo y sin interrupciones. Es recomendable llevar ropa cómoda que permita los movimientos naturales del cuerpo durante la respiración, finalmente cerrar los ojos. Puedes sentarte o acostarte con la espalda recta..
Luego, pon tu mano izquierda sobre tu pecho y tu mano derecha sobre tu abdomen. Respira aire en tus pulmones y trae tu barriga hacia adentro. Mientras exhala, suelte lentamente el aire a medida que se le hinche el estómago.
Se puede utilizar una determinada cadencia, de modo que cada una de las fases (inhalar, retener el aire, exhalar) dure cuatro segundos cada una.
Escaneo corporal
Otro ejercicio sencillo que podemos hacer antes de acostarnos. Consiste en acostarse boca arriba, cerrar los ojos y empezar a centrarse en cada parte del cuerpo mientras. Podemos empezar por los pies y subir o proceder a la inversa empezando por la cabeza.
Trata de identificar si en alguna parte del cuerpo hay tensión, dolor, qué sensaciones. También puede contraer los músculos de la región afectada durante unos segundos y luego aflojarlos. Al finalizar el ejercicio habrás alcanzado un estado de gran relajación fÃsica y mental.
El arte de no pensar: visualización
Dado que no es posible eliminar los contenidos mentales, ¿por qué no elegir deliberadamente uno que sea agradable y positivo, que transmita calma y bienestar? Esta es la visualización; Imagina de forma vÃvida y sostenible una escena hermosa y agradable.
Podemos visualizar un campo, una playa, delfines saltando al océano… El secreto es involucrarse en ella con los cinco sentidos: ¿Qué colores predominan en el paisaje? ¿A qué huele? ¿Puedes sentir la brisa? Este ejercicio es muy útil para centrar la atención.
Meditación y conciencia
El arte de no pensar también hace uso de la meditación y la conciencia. Si eres un principiante, puedes ayudarte con meditaciones guiadas en internet o hacer un curso, para ser guiado.
Por otro lado, la conciencia puede ser parte del dÃa de uno en cualquier momento. Eso es suficiente concéntrese en la actividad que se está realizando, ya sea cocinar, ducharse o hablar con un amigo.
Mantente enfocado en el presente y tus sentimientos; cuando la mente divaga hacia el pasado o el futuro, será necesario traerla suavemente de regreso al aquà y ahora.
El arte de no pensar
Aunque los consejos anteriores son relativamente fáciles de adoptar, no pensar es realmente un arte. Requiere paciencia, constancia y persistencia.
Con la práctica, se volverá cada vez más natural entrar en ese estado de calma y tranquilidad. y los pensamientos intrusivos se calmarán. Unos minutos al dÃa pueden marcar la diferencia, reducir el estrés y aumentar el bienestar psicológico. ¿Por qué no empezar hoy?