Un día difícil en el trabajo es aquel en el que hay mucho que hacer y poco tiempo, o no tienes muchas tareas, pero son complejas y exigentes. Aplicando unos sencillos consejos se puede llegar a buen puerto.
Última actualización: 31 de mayo de 2022
Un día ajetreado en el trabajo puede ser suficiente para estropear el estado de ánimo. Es una situación que requiere orden mental y calma para no acabar al borde del agotamiento. A veces, la jornada laboral se complica; otros tiempos, sabemos de antemano que enfrentaremos un día difícil en el trabajo.
En el segundo caso, es posible prepararse adecuadamente para resistir y salir airosos de las dificultades. Durante un duro día de trabajo hay que mantenerse al día concentración máxima, organícese inteligentemente y mantenga una actitud razonable.
Sobre esta base, en las siguientes líneas te presentamos cinco soluciones para que esos días difíciles no traigan más complicaciones.
"Cualquier dificultad eludida se convertirá luego en un fantasma que perturbará nuestro descanso".
-Federico Chopin-
Estrategias para afrontar un día difícil en el trabajo
1. Elimina el ruido y la multitarea
En un día de trabajo ajetreado es necesario eliminar cuanto más se pueda distracciones. El primero son los ruidos, especialmente las notificaciones y llamadas irrelevantes. Mejor apagar el teléfono y encenderlo solo a la hora de comer o al final del día.
Por otro lado, el multitarea no es una buena opción cuando se trata de resolver asuntos complejos o urgentes. La idea es enfocar las tareas de acuerdo a los objetivos propuestos. No hay lugar para la multitarea. La mejor alternativa es realizar una tarea a la vez con los cinco sentidos activos.
2. Divide el día en bloques
Vale la pena planificar su día con anticipación. El primer paso es definir con precisión lo que se va a hacer. A continuación, establece los elementos que componen el negocio.. Por ejemplo, si necesita preparar el informe de fin de mes, los elementos serían las partes que contiene, explícitamente indicadas.
Una vez aclarado eso, se sigue para proponer bloques de trabajo que coincidan con cada elemento identificado. Lo ideal es no pasar más de dos horas en cada bloque. Este tiempo debe ser suficiente para completar un bloque o un porcentaje del mismo. De esta manera, progresas de una manera más organizada y estás más motivado.
3. Trabaja paso a paso para afrontar un día difícil en el trabajo
Una de las estrategias para superar un día difícil en el trabajo es administrar el tiempo de manera eficiente. Esto equivale a completar tareas en un tiempo razonable y también tomar descansos. Sin esto último, es difícil conseguir lo primero.
La mejor manera de hacer esto es dividir las actividades en partes pequeñas.. La técnica del tomate es especialmente adecuada en estos casos: concentrarse en la actividad durante 2 seguidos y luego hacer una pausa de cinco minutos. Cada vez que se completan cuatro ciclos, se debe realizar el descanso. Esto ayuda a regular la energía disponible.
4. Ignorar actividades menores para afrontar un día difícil en el trabajo
Las actividades cruciales no eliminan el hecho de que pueden aparecer tareas aún más simples y completamente diferentes. Al comienzo del día es importante tener claro los objetivos a alcanzar.
Cuáles son las actividades que deben completarse y cuáles son los aspectos clave. Esto debe tener prioridad en todo momento.. Todo lo demás, mejor ignorarlo por completo.
5. Céntrate en la adecuación y no tanto en la perfección
Lo ideal es hacer el trabajo con excelencia, pero en un día difícil de trabajo puede no ser posible. Estos días no son los más apropiados para sacar lo perfeccionista que llevamos dentro. Si lo hacemos, corremos el riesgo de detenernos demasiado en los detalles y tener que correr hasta el final.
El objetivo es completar cada tarea con la satisfacción de haberlo logrado. Quizás más adelante tengamos tiempo para perfeccionar, pero es recomendable centrar la atención en completar las tareas propuestas.
Conclusiones
Un día de trabajo complicado se vuelve mucho más fácil cuando aplicamos estos sencillos consejos.
En definitiva, es muy gratificante descubrir que has conseguido llevar a cabo lo previsto; tal vez cansado, pero feliz de haber ganado el desafío.