Polimialgia reumática
La polimialgia reumática (PMR) es una afección incómoda que causa dolor, rigidez e inflamación en los músculos alrededor de los hombros, el cuello y las caderas.
El síntoma principal es la rigidez muscular matutina, que persiste durante al menos 45 minutos. También pueden ocurrir otros síntomas, que incluyen:
- Fiebre y sudoración
- Fatiga
- Pérdida de apetito
- Pérdida de peso
- Depresión.
El diagnóstico de polimialgia reumática requiere mucha atención. Debido a la similitud de los síntomas, los casos en los que se confunde con la artritis reumatoide no son raros.
La sospecha de polimialgia reumática debe surgir solo cuando el dolor y la rigidez persisten más de una semana.
Medicamentos y dieta
El tratamiento de la polimialgia reumática es de tipo farmacológico antiinflamatorio y analgésico.
La molécula más utilizada es un corticosteroide llamado prednisolona, que se utiliza para aliviar los síntomas; la dosis es inicialmente alta y se reduce durante 1,5-2 años.
La polimialgia reumática puede requerir uno dieta especifica. El esquema nutricional no está dirigido al tratamiento del agente desencadenante, sino a la prevención de efectos secundarios farmacológicos. Los corticosteroides tienden a aumentar la riesgo de osteoporosis.
Por ello, la dieta para la polimialgia reumática debe poseer todas las características nutricionales propias de la dieta contra la osteoporosis.
OSTEOPOROSIS EN BREVE
La osteoporosis se refiere a la pérdida de fuerza esquelética.
En la base de la condición osteoporótica hay una reducción de la masa, la arquitectura y la fuerza óseas. En términos prácticos, hay una desmineralización y una pérdida de hidroxiapatita (calcio + fósforo).
Las causas son múltiples; más a menudo nutricional, metabólico, farmacológico, hormonal y patológico.
Corrección de estilo de vida
Durante la terapia con cortisona, es necesario corregir algunos factores inapropiados o comportamientos "en riesgo" de osteoporosis; particularmente:
- Elimina el humo del cigarrillo
- Aumentar la exposición al sol
- En caso de un estilo de vida sedentario, promueva la actividad física; más adelante veremos cómo.
Recuerde que el agente causal más importante de la osteoporosis es atribuible al estilo de vida en la edad de desarrollo (crecimiento).
Consiste en la imposibilidad de alcanzar el pico de masa ósea (por deficiencias nutricionales, sedentarismo, fármacos, etc.) y, en la edad adulta, no se puede modificar.
Esto significa que la dieta para la polimialgia reumática es un estilo de alimentación que tiene como objetivo reducir las posibilidades de complicaciones esqueléticas, pero NO es una panacea.
Principios nutricionales
Es posible intentar prevenir la aparición o agravamiento de la osteoporosis aplicando una serie de correcciones dietéticas y de estilo de vida.
Siempre es necesario eliminar:
- Abuso de alcohol
- Deficiencias nutricionales específicas.
La estrategia alimentaria debe asegurar una ingesta satisfactoria de calcio y vitamina D.
Por el contrario, es recomendable limitar la ingesta de algunos nutrientes. Si están en exceso, estos podrían ser potencialmente dañinos; en particular, los siguientes están involucrados principalmente:
- Exceso de sodio
- Exceso de fósforo
- El exceso de proteína
- El exceso de agentes anti-nutricionales.
Calcio
El calcio y el fósforo son los elementos que forman la hidroxiapatita.
Se supone que la deficiencia nutricional o el aumento de la excreción de calcio pueden promover el riesgo de osteoporosis.
El cuerpo absorbe estos minerales de los alimentos; sin embargo, el tratamiento farmacológico de la polimialgia reumática altera la absorción de calcio en la dieta.
El requerimiento nutricional de calcio no siempre es fácil de satisfacer con una nutrición ordinaria. Esto puede aumentar el crecimiento, el embarazo, la lactancia, la vejez y la terapia con corticosteroides.
Para contrarrestar el efecto secundario de los medicamentos reumáticos de la polimialgia, las personas mayores de 60 años (especialmente las mujeres) deben aumentar su ingesta nutricional de calcio. En este caso, es recomendable alcanzar una ingesta diaria de 1.000 mg o más; mejor si entre 1.200 y 1.500 mg / día.
Por lo general, este objetivo se puede lograr bebiendo un litro de leche / yogur al día y comiendo ciertos alimentos ricos en calcio; entre estos, especialmente los quesos curados y los alimentos enriquecidos.
En el caso de que no sea posible cumplir con estas recomendaciones, se hace necesario contar con un profesional de la nutrición para una dieta personalizada.
Vitamina D
La dieta para la polimialgia reumática también debe ser rica en vitamina D (calciferol), una molécula soluble en grasa prohormonal.
Esta vitamina es fundamental para el funcionamiento del metabolismo óseo. Sin calciferol, independientemente de la disponibilidad de calcio y fósforo en los alimentos, el cuerpo no puede prevenir eficazmente la rarefacción del esqueleto.
En última instancia, la vitamina D es necesaria para absorber y metabolizar el calcio de la dieta.
El calciferol es producido de forma independiente por el cuerpo. Esto sucede gracias a la exposición de la piel a los rayos solares.
La vitamina D también se puede obtener de los alimentos. Los alimentos más ricos en calciferol son el pescado azul y la yema de huevo.
Además, la industria alimentaria ofrece una amplia variedad de productos dietéticos fortificados con esta vitamina. La mayoría son lácteos por naturaleza o sustitutos, como: leche, leche de soja, yogur, yogur de soja, etc.
Para tener un buen aporte nutricional de calciferol es necesario:
- Consume 3 raciones de pescado azul a la semana (150-250 g). La porción y frecuencia de consumo no puede ser ilimitada o excesivamente abundante. Tenga en cuenta que los productos pesqueros, especialmente los grandes, pueden contener niveles moderados de mercurio (metal contaminante tóxico).
- Consume 3 huevos enteros por semana
- Consume algunos productos fortificados a diario.
Especialmente en sujetos mayores de 60 años, es recomendable tomar un complemento alimenticio con una dosis de 10-20μg o 400-800 unidades internacionales (UI) de vitamina D al día.
Ejercicio físico
La terapia motora de la polimialgia reumática requiere un conocimiento preciso de las necesidades subjetivas y características físicas. Es estrictamente necesario encontrar el equilibrio adecuado entre el ejercicio físico (volumen, intensidad, frecuencia, etc.) y el descanso / recuperación.
Por lo general, la actividad motora ayuda a aliviar la rigidez matutina y modera los síntomas generales de la polimialgia reumática. Sin embargo, en exceso, puede agravar la percepción del dolor.
La fisioterapia puede ser útil para combatir el dolor y mantener la movilidad articular.
Los protocolos que permiten aplicar tensión mecánica al esqueleto ayudan a mantener la densidad y la arquitectura óseas.
La actividad más tolerada en promedio es caminar, lento o rápido, en la llanura o con pendientes. Los más atrevidos o los que mejor afrontan el dolor, prueban su suerte en actividades alternativas como: correr, otros deportes aeróbicos (natación, ciclismo, etc.), ejercicios con gomas elásticas (sobrecargas), etc.
Moléculas potencialmente dañinas
Existen componentes dietéticos que, al interferir en la absorción y metabolismo del calcio y la vitamina D, son capaces de comprometer la salud ósea.
La dieta para la polimialgia reumática debe tener esto en cuenta y tratar de prevenir este tipo de interacciones.
A ciertas concentraciones, el calcio y el fósforo pueden entrar en conflicto en la absorción intestinal. La proporción correcta entre los dos iones es 3: 1 o 2: 1.
Teniendo en cuenta que:
- El calcio es generalmente más deficiente en los alimentos que el fósforo.
- Un exceso de fósforo puede empeorar la absorción intestinal de calcio.
Es recomendable no excederse con productos muy ricos en fósforo, prefiriendo los abundantes en calcio (especialmente en la misma comida).
Por ejemplo, es mejor evitar asociar ciertas semillas (calabaza, girasol, quinua, etc.) con leche, quesos curados y alimentos enriquecidos. Recuerde que el fósforo todavía es abundante incluso en los productos lácteos.
El exceso de sodio en la dieta es un factor potencialmente dañino para el metabolismo del calcio.
Se supone que el exceso de sodio en los alimentos puede promover la excreción urinaria de calcio al aumentar su demanda metabólica.
Otras fuentes sugieren un efecto similar atribuible al exceso de proteínas y nitrógeno. Por otro lado, en este caso la investigación científica no ofrece resultados repetibles.
La presencia de moléculas antinutricionales es capaz de unir (quelar) el calcio en la luz intestinal, impidiendo su absorción. Esto ocurre sobre todo en presencia de ácido oxálico que, al unirse al calcio, da lugar al oxalato de calcio. El ácido oxálico se encuentra principalmente en: ruibarbo, espinaca, remolacha, cacao, remolacha, etc. Aunque la concentración en los alimentos se puede reducir con la cocción, es recomendable evitar combinar alimentos con ácido oxálico con aquellos ricos en calcio.
Otra molécula que ejerce un efecto similar es el ácido fítico, típico de las legumbres y el salvado de cereales. El ácido fítico tiene un efecto quelante, que afecta principalmente al zinc y al hierro, pero también es aconsejable evitarlo para optimizar la absorción del calcio. Se degrada con la cocción y se puede eliminar parcialmente remojando legumbres o salvado (desechando el agua).
Para optimizar la absorción de calcio también es recomendable evitar la aparición de diarreas. Esto puede tener muchos desencadenantes; se recomienda prestar atención a:
- Alimentos responsables de los síntomas típicos de las intolerancias alimentarias (lactosa o gluten)
- Laxantes: alimentos, medicamentos y suplementos.
- Exceso de fibra: alimentos y suplementos
- Exceso de nervios: bebidas especialmente estimulantes (café, tés fermentados, chocolate y bebidas energéticas) y complementos alimenticios termogénicos.
Más
En la reducción sintomatológica de la polimialgia reumática también pueden ser de ayuda pequeños trucos como:
- Practique con regularidad estiramientos y ejercicios para mejorar la movilidad articular.
- Practica baños termales.
Causas, incidencia y complicaciones
Actualmente se desconocen las causas de la polimialgia reumática; la hipótesis más aceptada es una combinación de factores genéticos y ambientales.
La polimialgia reumática es un trastorno bastante común. En sujetos mayores de 50 años (la mayoría son> 70 años) se estima una incidencia de 10 casos por 100.000 habitantes. Por otro lado, es muy raro en los jóvenes. Afecta principalmente a las mujeres.
La polimialgia reumática tiene una correlación estadística muy importante con la arteritis de Horton temporal (de células gigantes).
Los síntomas de esta última patología, que pueden ocurrir antes, durante o después de la polimialgia reumática, son:
- Dolor de cabeza e hinchazón del cuero cabelludo (doloroso al tacto)
- Dolor en los músculos de la mandíbula al masticar.
- Alteraciones visuales (visión doble o reducción funcional).
A diferencia de la polimialgia reumática, la arteritis requiere atención médica repentina para evitar daños permanentes.
También en este caso la terapia es principalmente farmacológica basada en corticosteroides.