Sobrepeso, diabetes, cardiopatÃas: la falta de trabajo tiene una serie de repercusiones que van más allá del malestar psÃquico, y que hay que tener en cuenta.
Última actualización: 22 de abril de 2021
Además de proporcionar ingresos, el trabajo es fundamental para la vida adulta. Te permite desarrollar habilidades y relaciones sociales, para construir tu propia identidad. Es, en general, una fuente de bienestar. Por lo tanto, el desempleo tiene una serie de consecuencias visibles. Uno de los efectos más importantes es el estrés por desempleo., con repercusiones en la salud fÃsica y psicológica.
El estrés del desempleo se alimenta de varias fuentes: por un lado, las dificultades económicas, por otro, la sensación de aislamiento social, de menos bienestar, de falta de apoyo. Se ha observado que las personas desempleadas tienen niveles de estrés mucho más altos que la población general.
Salud y desempleo
El estrés del desempleo, además de ser un problema en sà mismo, está ligado a una serie de dolencias. Se asocia con un menor bienestar subjetivo y altos niveles de ansiedad. Un estudio encontró que al inicio del desempleo, la percepción de bienestar cae dramáticamente y aumenta la ansiedad. Tras una fase de estabilización, en el paro de larga duración, los niveles de estrés vuelven a subir.
Los desempleados muestran peor salud mental, correlacionada con un mayor número de visitas psiquiátricas y psicológicas, asà como un mayor número de diagnósticos. Estos efectos también parecen ser independientes del nivel de ingresos.
Estrés del desempleo
El estrés que provoca el desempleo está ligado a una serie de cambios fisiológicos que, de prolongarse en el tiempo, son nocivos para la salud. Cuando vivimos una situación estresante, el cuerpo se prepara para afrontarla produciendo una serie de cambios. En este caso el eje hipotálamo-pituitario-suprarrenal (HPA) responde al estÃmulo estresante (en este caso continuo) secretando la hormona cortisol.
Este proceso, que conduce al pico de cortisol, es natural y adaptativo. Sin embargo, en una situación de estrés continuado, la liberación de esta hormona produce desequilibrios en la activación del eje HPA y, con estos, alteraciones neuroendocrinas peligrosas para la salud.
Estos desequilibrios de cortisol se han registrado en personas desempleadas en numerosos estudios. Sin embargo, las alteraciones varÃan según la duración del desempleo y la edad. Los jóvenes tienden a mostrar un nivel de estrés creciente con el alargamiento del perÃodo de desempleo, mientras que en los adultos aumenta en los primeros seis meses y luego se estabiliza en un nivel alto.
Consecuencias fÃsicas del estrés del desempleo
El estrés del desempleo se ha relacionado con una serie de enfermedades.
Rischio cardiovasculares
Además de una producción anormal de cortisol, el desempleo está asociado con altos niveles de proteÃna c reactiva y fibrinógeno, que están Ãntimamente relacionados con el riesgo cardiovascular. Es decir, los desempleados presentan un mayor riesgo cardiovascular que el resto de la población.
Se ha encontrado que el desempleo a largo plazo está asociado con infarto agudo de miocardio y accidente cerebrovascular en varios estudios. También se ha asociado con la enfermedad de las arterias coronarias. Sin embargo, los resultados deben tomarse con cautela ya que un gran número de factores pueden influir en el desarrollo de estos trastornos.
Obesidad y estrés por desempleo
Otra consecuencia del estrés por desempleo es la dificultad para mantener un peso saludable. Los resultados muestran un aumento de peso proporcional a la duración del desempleo. Esto podrÃa explicarse por un cambio en los hábitos alimentarios; un ingreso reducido conduce a la compra de productos más baratos y menos saludables.
El factor tabaquismo también estarÃa ligado a esto. En este sentido, las investigaciones indican que la reducción de peso suele darse en fumadores desempleados, mientras que los no fumadores aumentan de peso.
diabetes tipo dos
La diabetes tipo 2 se asocia con patrones irregulares en la producción de cortisol, obesidad y riesgo cardiovascular. Por lo tanto, es comprensible que el desempleo también esté relacionado con el riesgo de diabetes. Por ejemplo, en un estudio de 2017 de Nina Rautio se tuvo en cuenta el Ãndice de masa corporal, el nivel de actividad fÃsica y otros factores sociodemográficos. Los desempleados mostraron un mayor riesgo de padecer prediabetes y diabetes tipo 2.
En definitiva, el desempleo tiene consecuencias que van más allá de la angustia psicológica. Estos resultados son particularmente sorprendentes: la mala salud puede complicar la ya difÃcil tarea de encontrar un trabajo. Por lo tanto, es fundamental que las intervenciones en esta categorÃa incluyan estrategias de manejo del estrés y promoción de hábitos saludables.