La técnica del 8 de mayo se basa en el funcionamiento de los ritmos ultradianos y consiste en organizar las tareas de forma que se aprovechen al máximo las capacidades de nuestro cerebro, protegiéndolo de sobrecargas y fatigas y obteniendo asà una mayor productividad.
Última actualización: 08 de febrero de 2020
La técnica del 8 de mayo se basa en dos premisas relacionadas con el funcionamiento del cerebro. La primera nos dice que este órgano, como todo en el mundo natural, funciona de forma cÃclica y no lineal. La segunda premisa establece que la atención y la concentración son dos recursos limitados. Nuestro cerebro es realmente voluble, no está preparado para trabajar a plena capacidad todo el tiempo.
Los procesos naturales son cÃclicos e implican una serie de fases en las que se desarrollan determinados mecanismos. Cuando termina un ciclo, deja espacio para el siguiente, al igual que la noche y el dÃa, las estaciones o el ciclo menstrual. La concentración también sigue un ciclo, ligado a ritmos ultradianos, y la técnica del 8 de mayo se basa en su análisis.
En cuanto a los lÃmites de la atención, estos tienen que ver con el equilibrio entre la información que ingresa y la capacidad del cerebro para procesarla. No siempre estamos preparados para recibir y gestionar plenamente los estÃmulos cognitivos. La técnica del 8 de mayo tiene en cuenta esta realidad.
"Para reducir lo infinito a lo finito, lo inalcanzable a lo real humano, sólo hay un camino: la concentración".
-Teófilo Gautier-
Es importante aclarar que si bien la técnica del 8 de mayo parte de premisas cientÃficas, no es un método desarrollado por la ciencia. Es un esquema empÃrico que se ha ido aplicando paulatinamente demostrando ser muy eficaz para el desarrollo de las tareas intelectuales. Ha resultado particularmente útil para las personas que trabajan con el intelecto. Profundicemos.
La técnica del 8 de mayo y los ritmos ultradianos
Los ritmos ultradianos son mecanismos cÃclicos que duran menos de 20 horas. Estudiándolos desde un punto de vista estrictamente relacionado con la concentración y la atención, se estableció que el cerebro humano logra mantener una lÃnea de atención de 1. Después de este perÃodo de tiempo, estamos abrumados por la distracción.
El ciclo que determina la duración sostenible de la actividad intelectual y la necesidad absoluta de descanso varÃa entre 90 y 120 minutos. Esto significa que en este perÃodo de tiempo podemos realizar una tarea de manera eficiente, después de lo cual las funciones cognitivas comienzan a reducirse significativamente. Para ello es fundamental el descanso.
La técnica del 8 de mayo ha logrado muestran que los 2 primeros trabajos son los más productivos, es el momento en el que llevar a cabo las actividades más complejas. Durante el resto del dÃa, nuestro rendimiento cognitivo disminuye gradualmente. ¿Cómo aplicar este conocimiento a nuestra vida diaria para optimizar nuestro desempeño? Averigüémoslo de inmediato.
El comienzo del dÃa es crucial
Tenemos 2 de oro al comienzo del dÃa. Para no desperdiciarlos, es bueno estar al tanto de ellos.. Muchas personas comienzan su jornada laboral leyendo las noticias, respondiendo correos electrónicos o interactuando en las redes sociales. Una reflexión: tal vez de esta forma se esté desperdiciando el mejor momento de potencial retorno en actividades que no lo requieren.
La sugerencia es empezar el dÃa jugando las actividades más complejas que requieren más creatividad. Tenemos unas dos horas y media para explotar, hagámoslo asÃ:
- Primero: calentamiento del cerebro. El cerebro también necesita un breve calentamiento antes de ponerse en marcha. Por lo tanto, el primero debe dedicarse a la calefacción. Lo ideal es utilizar este tiempo para planificar el trabajo y revisar el plan del dÃa.
- Segundo: tarea compleja. Los primeros 60 minutos deben usarse para dedicarse a una de las tareas más difÃciles que tenemos reservadas, que es una que requiere alta concentración o creatividad.
- Tercero: pausa. Pasada la primera hora, podremos hacer una pausa de 10 o en la que levantarnos, estirar las piernas y dedicarnos a algo totalmente diferente a lo que estábamos haciendo.
- Cuarta: fase dorada. Llegan otros 60 minutos de trabajo que son los más productivos del dÃa, y necesitaremos completar el trabajo iniciado anteriormente o iniciar uno nuevo.
- Quinta: fase de amortiguación. En la última parte de este ciclo tendremos que realizar tareas fáciles que no requieran gran atención.
lo que queda del dia
Pasadas las primeras tres horas y media, lo ideal es descansar. La mayorÃa de las veces no es posible y nos vemos obligados a continuar con las demás actividades del dÃa. Sin embargo, después de la primera fase de mayor productividad, tendremos que abordar el trabajo de manera diferente.
Después de un descanso de otros 10 o, se puede iniciar un nuevo ciclo de 2. En esta nueva etapa no será necesario calentar el cerebro y podremos concentrarnos en tareas mecánicas o con un alto componente fÃsico. Esto puede ayudarnos a despertar y reactivar los mecanismos que empiezan a ralentizarse. La idea es hacer actividades de 40 minutos seguidos de 10 minutos de descanso.
Está claro que no todo el mundo puede permitirse el lujo de aplicar la técnica del 8 de mayo con precisión. Es recomendable adaptar este método a su situación particular, y verás que los resultados serán inmediatamente sorprendentes. Pruébalo, y no te arrepentirás.
Nota. Lo expuesto en este artÃculo no es una regla válida para todos. Nuestro objetivo es entender la lógica, no aplicarla rÃgidamente. De hecho, hay diferencias individuales importantes que siempre deben ser consideradas. Lo ideal es que cada uno adapte esta técnica a sus propios ritmos y tiempos.