La psicologÃa nos ayuda a ver la vida y el mundo desde una perspectiva más realista. Averigüemos algunas verdades sobre la naturaleza humana y cómo nos afectan.
Última actualización: 06 octubre, 2020
Todos sentimos que tenemos las habilidades de los psicólogos, porque de una forma u otra logramos interpretar el comportamiento de los demás en relación con los sentimientos, pensamientos o circunstancias presentes. De hecho, es habitual recurrir a la llamada psicologÃa popular. Sin embargo, no todo lo que se dice o piensa en esta área está cientÃficamente probado, de hecho, a menudo ignora la verdadera naturaleza humana.
Algunas creencias, personales o colectivas, no son del todo ciertas aunque están muy extendidas. Aún asÃ, algunos datos poco conocidos podrÃan cambiar positivamente la forma en que muchas personas enfrentan los desafÃos diarios.
Tales verdades psicológicas nos permiten analizar la naturaleza humana adoptando un enfoque más realista., ya que se basan en las evidencias recopiladas a lo largo de los años por la psicologÃa, a nivel teórico y experimental. Conocerlos nos ayuda a examinar con mayor precisión lo que vemos y pensamos de nosotros mismos y de los demás.
"Los hombres son animales razonables regulados por el impulso de la pasión".
-Alexander Hamilton-
La naturaleza humana explicada por la psicologÃa
1. Los demás no dependen de nuestras acciones
Tendemos a ser un poco más narcisistas y vanidosos de lo que parece a primera vista. Cuando nos exponemos públicamente, en un espacio fÃsico o virtual, estamos convencidos de que estamos atrayendo toda la atención hacia nosotros.
En realidad no es asÃ, pero esta creencia lleva a muchas personas a preocuparse sobre todo por lo que dicen de sà mismos en lugar de expresar su propia opinión.
En general, Las personas que nos rodean nos prestan menos atención de lo que pensamos.. Pocos se darán cuenta si usamos la misma ropa que ayer, menos aún prestarán atención a los juicios que expresamos sobre nosotros mismos.
2. La naturaleza humana está marcada por el cambio
Pensamos que siempre somos los mismos a lo largo del tiempo, pero no es asÃ. Nuestra forma de ser, actuar, pensar y sentir está en constante evolución, aunque la mayorÃa de las veces no notamos estas transformaciones.
Ciertamente hay elementos o ejes que se mantienen en el tiempo, pero incluso esas estructuras sufren cambios a lo largo de los años.
Entonces, asà como nuestra apariencia cambia con el tiempo, también se producen transformaciones dentro de nosotros. Nuestra identidad es una realidad dinámica; somos, pero potencialmente también somos lo que seremos.
3. Cometer errores nos hace parecer más humanos
Muchos creen que los errores producen rechazo y opinión negativa. Nada más malo. Si lo pensamos bien, generar desconfianza y cierto rechazo es una persona que todo lo hace bien y nunca se equivoca.
Algunos estudios confirman que aquellos que cometen errores o muestran su vulnerabilidad tienen más probabilidades de ser aceptados y queridos por los demás. En muchos casos, los errores nos acercan a los demás; nos recuerdan que somos seres limitados y que, por tanto, podemos y debemos ayudarnos unos a otros.
4. Casi nadie sigue los consejos de los demás
Un hecho sobre la naturaleza humana que a casi nadie le gusta admitir, pero que forma parte de la realidad cotidiana. La gente pide consejo, pero la mayorÃa de las veces no están dispuestos a seguirlo.
En la mayorÃa de los casos no pides la opinión o guÃa de otros porque buscas ayuda concreta. De hecho, todo lo contrario. Más bien, busquemos una explicación.
Muchas personas recurren a otros en busca de consejo, pero en realidad, inconscientemente quieren encontrar apoyo o justificación por lo que ya saben que no deben hacer. Por la misma razón, después de recibir el consejo, muchas veces se hace lo contrario.
5. Solo podemos controlar nuestras reacciones
Uno de los grandes males contemporáneos es la obsesión por tener control sobre situaciones incontrolables. Muchos se quejan de las actitudes de los demás o de cómo va el mundo, como si pudiéramos adaptar la realidad a nuestras necesidades.
La verdad es que muy a menudo ni siquiera podemos controlarnos a nosotros mismos, y mucho menos controlar a los demás. Quizás lo único sobre lo que tenemos poder son nuestras reacciones., o la forma en que respondemos a todo lo que sucede fuera de nosotros.
Conclusiones sobre la naturaleza humana
Una actitud rÃgida y manÃaca hacia la vida se desvÃa considerablemente de la verdadera naturaleza humana. Somos más propensos a errores, vulnerables e ignorados de lo que pensamos. Aprender a ser más condescendientes y humanos con nosotros mismos sin duda nos hará bien.