¿Alguna vez te has tomado un minuto para pensar en cómo el estrés afecta nuestra salud? Si la respuesta es no, te recomendamos leer los argumentos del Dr. Daniel López Rosetti.
Última actualización: 04 marzo, 2021
La meditación y el estrés son dos conceptos que a menudo se relacionan. ¿Pero de qué manera? Podríamos decir que el informe se basa en un problema y una posible solución. Sin embargo, para poder decirlo con certeza, sería bueno entender cómo el estrés se vuelve patológico y cómo la meditación puede ayudarnos a evitar sus síntomas.
Los médicos suelen evitar este tema, pero el Dr. Daniel López Rosetti no lo hace. Este cardiólogo, escritor y especialista en estrés se ha hecho famoso por su particular visión de los problemas cotidianos.
También es considerado "el médico que habla fácil", que se distingue por su claridad conceptual y cercanía al público.
“En términos médicos, la felicidad se percibe como un bienestar subjetivo”.
-Daniel López Rosetti-
Estrés: el enemigo interior
A través de su experiencia personal, López Rosetti identificó las consecuencias del sufrimiento y el agotamiento psíquico en su propio cuerpo.
Los obstáculos y problemas que nos hacen sufrir repercuten en nuestro organismo en el sentido más físico. Sin embargo, tendemos a ignorarlos porque no nos impiden hacer las cosas al principio. Sin embargo, cuando menos lo esperamos, explotan en forma de enfermedad.
Cargas contra resistencia
El doctor López Rosetti pasó por un período de gran estrés por la muerte de su padre. Por problemas laborales y diarios, en ese momento no pudo prestar la atención necesaria al episodio y soportó el dolor. Más tarde le diagnosticaron tuberculosis pleural.
Según Rosetti, el estrés es un sufrimiento crónico sostenido en el tiempo. Para entender esto, podríamos representarlo en una escala compuesta por:
- Cargas: todo lo que soportamos.
- Resistencia: capacidad a partir de la cual ya no se soportan cargas.
Cuando las cargas superan la resistencia, aparecen los síntomas. Este proceso se denomina en psicología como somatización.
La gota que rompió el lomo del camello
El problema fundamental surge cuando se rompe el equilibrio y las cargas superan la resistencia. Los síntomas consisten en información que el cuerpo nos envía para decirnos que algo anda mal, incluyendo:
- Insomnio. Incapacidad para conciliar el sueño o permanecer dormido.
- Dolor crónico. En la cabeza, el estómago o los músculos.
- nerviosismo. Ansiedad y pánico ante situaciones relacionadas con factores estresantes. Es una de las alarmas más habituales en nuestro organismo.
- Dificultad para respirar o agitación. El síntoma más evidente del agotamiento. Los pacientes se sienten agitados sin haber realizado un esfuerzo físico que lo justifique.
- Deterioro de la memoria y falta de concentración.
- Miedo irracional.
Los síntomas son información.
Para el Dr. López Rosetti, los síntomas son información que no podemos ignorar. Aunque podamos ir al médico y nos diga si es empático, nosotros mismos tenemos que interpretar los signos del estrés. Para hacer esto, necesitamos entender la siguiente estructura de las fases de estrés:
- percepción. La realidad existe a través de nuestros procesos mentales. La interpretación de la realidad predispone al ser humano. Por tanto, ignorar los síntomas del estrés no será lo mismo que prestarles atención.
- Comportamiento y hábitos. Al ignorar el estrés, corre el riesgo de caer en un círculo vicioso. Por lo tanto, un fumador cuando está estresado tenderá a fumar compulsivamente. Esto sucede con la comida, el alcohol y cualquier otro mal hábito.
- Síntomas físicos y psicológicos.. Los comportamientos mencionados se convierten en síntomas físicos y psicológicos. Un ejemplo físico sería la alteración del sueño y la agitación, y un ejemplo psicológico sería la ansiedad o la depresión.
- enfermedad. Si el estrés no desaparece o disminuye en intensidad, los síntomas físicos y psicológicos conducen a la enfermedad. Es la forma en que nuestro cuerpo nos dice que paremos.
Tomar medidas contra el estrés es importante
Para el Dr. López Rosetti, una persona estresada es una persona que no es feliz. El tratamiento del estrés es médico, psicológico e incluso filosófico.
Incluso una persona que no se da cuenta de las consecuencias del estrés en su cuerpo puede no tener una razón clara para hacerlo.
Esto supera cualquier herramienta médica o psicológica como la medicalización o el conductismo. Es en este punto que la relación entre la meditación y el estrés se considera como un posible enfoque.
¿Qué es la meditación?
La meditación no es algo esotérico, religioso o extraño, aunque por sus características y origen se relaciona con procesos espirituales. Para el Dr. López Rosetti, la meditación es un proceso biológico. Esta afirmación se basa en la diferenciación de funciones en el cerebro.
La racionalización del hemisferio izquierdo
El hemisferio izquierdo, racional, lógico y matemático, es responsable de constantes pensamientos intrusivos. Cuando enfocamos la atención del hemisferio izquierdo en un objeto y logramos concentrarnos, estamos meditando.
El hemisferio derecho en éxtasis
Cuando el hemisferio izquierdo (generalmente dominante) se enfoca en algo, el hemisferio derecho, que es más abstracto y espacial, comienza a dar un paso adelante. Este hemisferio no tiene la concepción del tiempo que tiene el izquierdo y por lo tanto obtenemos una relajación que baja el estado de alerta y restablece las funciones corporales.
¿Cómo lograr este estado?
Según el autor, la meditación se logra utilizando un objeto que capta nuestra atención, independientemente de su significado. Puede ser una vela, un mandala o un rosario.
No debemos observar el lado religioso, místico y supersticioso de la cosa: lo importante es que este objeto logre captar nuestra atención. El hemisferio izquierdo se enfocará y nuestro hemisferio derecho trabajará libremente.
Meditación y estrés, cuestión de hábito y práctica
Para López Rosetti, la relación entre meditación y estrés es fructífera siempre que la primera se practique con regularidad. Esta técnica no nos curará, pero romperá el vórtice de retroalimentación negativa que convierte los malos hábitos en enfermedades.
¿Cuántas veces te has parado a comprobar que todas las partes de tu cuerpo están bien? La meditación es muy recomendable en el caso de:
- Relajación neuromuscular guiada. Centrar progresivamente nuestra atención en diversas zonas del cuerpo.
- Ejercicios de respiracion. Respirar profundamente ayuda a disminuir el ritmo cardíaco.
- concentración enfocada. Concéntrese en un objeto con la ayuda de música relajante.
- Control de estímulo. Dale menos importancia a los pensamientos invasivos: el truco está en dejarlos fluir sin afectarnos.
Por ejemplo, no nos damos cuenta de que tenemos gastritis hasta que ya no podemos soportar el dolor. Todo esto se puede evitar dedicando unos minutos al día a desconectar y evaluar cómo se siente nuestro cuerpo en relación a los ritmos que le imponemos.
“La ansiedad es un proceso normal hasta cierto punto. Pero cuando supera el límite se vuelve anormal y es inútil”.
-Daniel López Rosetti-