Los movimientos insurgentes son un tema complejo. En este artículo intentaremos definirlo e identificar los factores que hacen posible su éxito.
Última actualización: 15 de junio de 2020
Hablar de movimientos insurgentes puede ser engañoso. Por ejemplo, ¿el Estado Islámico es un movimiento insurgente o un grupo terrorista? La respuesta es compleja, también por los cambios que ha sufrido este grupo. Sin embargo, para definir los movimientos insurgentes, primero será necesario comprender qué se entiende por insurrección.
Pero antes de dar una definición de insurrección, veamos algunos de los grupos que a lo largo del tiempo se han incluido entre los movimientos insurreccionales. Entre ellos, los más conocidos son el Estado Islámico, Al Qaeda, Boko Haram, las FARC, los talibanes, Hezbolá, Hamas, ETA y el IRA. Aunque algunos de ellos ya han desaparecido, en determinados momentos de su historia han sido considerados grupos rebeldes.
Definición de insurrección
Encontrar una definición clara y precisa de insurrección es una tarea algo difícil. Sin embargo, es posible destacar algunos puntos comunes a las diferentes definiciones. En este sentido, la insurrección puede ser considerada como una serie de acciones llevadas a cabo por una minoría dentro de un estado con el objetivo de imponer un cambio político. Descubrimos, pues, que el objetivo es ante todo político.
La insurgencia utiliza la propaganda y la presión militar para persuadir o intimidar a la población. De hecho, el objetivo es ganar el apoyo popular. El reconocimiento y aceptación por parte de la población será por tanto fundamental y determinará, en gran medida, su éxito o fracaso.
Finalmente, la insurrección se caracteriza por la desigualdad de fuerzas. Dado que el Estado suele ser más poderoso, las insurrecciones optan por enfrentamientos asimétricos y prolongados en los que la guerra psicológica se convierte en la principal herramienta.
"Como un animal salvaje, la verdad es demasiado poderosa para ser enjaulada".
-Verónica Roth-
Cómo se crean y consolidan los movimientos insurreccionales
Para iniciar un movimiento insurreccional, se deben considerar los siguientes factores:
- Crear una identidad política relevante: los insurgentes deben asegurarse de que la identidad que proponen se vuelva más importante que otras; al punto de estar dispuesto a defenderlo con la lucha.
- Casarse con una causa tentadora: debe incluir cierto descontento compartido con la población.
- Atraer el apoyo popular: Si se cumplen los siguientes factores, esto se vuelve más probable.
- Tener un liderazgo sólido: un buen liderazgo da coherencia, coordinación y credibilidad al grupo.
- Prevalecer sobre los grupos rivales: Ser más fuerte que otros grupos o incluso colaborar con ellos puede determinar la supervivencia del movimiento insurgente.
- Tener un escondite: los escondites o refugios son muy importantes para la supervivencia del grupo.
- Busca apoyo externo: el apoyo de otros estados puede ser decisivo.
- Espere un comportamiento incorrecto de las autoridades políticas: una mala acción del Estado puede provocar el apoyo popular a la insurrección.
“Como hijo del pueblo nunca podré olvidar que mi único objetivo debe ser siempre su prosperidad”.
-Autor desconocido-
Clasificación de los movimientos insurreccionales
Generalmente la distinción es entre movimientos insurreccionales y movimientos de liberación nacional. En los movimientos insurreccionales, los ciudadanos se oponen a un determinado gobierno por motivos ideológicos, étnicos, económicos, etc. En los movimientos de liberación nacional, por el contrario, los insurgentes chocan con un régimen apoyado o controlado por extranjeros.
Sin embargo, también existen otras clasificaciones posibles, como la que se basa en los objetivos que persigue el movimiento. Esta clasificación da lugar a tres tipos diferentes:
- Poder y proyecto político: el objetivo de estos grupos es tomar el control del estado para establecer un nuevo régimen.
- Poder político y territorio: en este caso, los grupos apuntan al fin de una ocupación extranjera y apuntan, en otras palabras, a la independencia nacional.
- Autonomía política local o tribal, creando o manteniendo una situación fuera del control del estado: estos grupos buscan socavar la autoridad del gobierno de un estado parcial o totalmente fallido y luego tomar el poder.
Los cinco pilares de los movimientos insurgentes
Los movimientos insurgentes pueden utilizar cinco herramientas estratégicas para lograr sus objetivos. Es decir: lucha armada, propaganda, asistencia a la población, activismo social y político y relaciones internacionales.
- Lucha armada: el uso de la violencia es muy común en las insurrecciones, las técnicas utilizadas suelen ser la guerra de guerrillas y, como apoyo, el terrorismo.
- Propaganda: la propaganda tiene como objetivo conquistar las mentes y los corazones de la población, tanto a nivel nacional como internacional.
- Asistencia a la población: para obtener apoyo y movilizar a la población, las actividades sociales y de asistencia son a menudo otra estrategia utilizada por los grupos rebeldes.
- Activismo social y político: la creación e infiltración de asociaciones cívicas, sindicatos e incluso partidos políticos suelen ser empleados por los movimientos insurgentes.
- Relaciones Internacionales: el apoyo internacional es generalmente una gran ventaja, por lo que estos grupos intentan conseguirlo.
Como se puede deducir de estos lineamientos, los movimientos insurgentes se asemejan a otros grupos violentos que hacen uso del terrorismo y la guerrilla. Distinguirlos no siempre es fácil. Sin embargo, son bien conocidos los factores que hacen posible su nacimiento y éxito.
