Las decisiones que tomamos todos los días se parecen mucho a las vías del tren. Darse cuenta de ello es el secreto para cambiar permanentemente su vida.
"La mejor forma de predecir el futuro es crearlo".
Alan Kay.
Levanta la mano si nunca has fantaseado con querer cambia tu vida ¿durante la noche?
Ganancias de lotería sensacionales, encuentros fortuitos con personajes famosos, quizás un legado inesperado. Pasamos tanto tiempo fantaseando sobre cómo nos gustaría cambiar nuestras vidas que nos olvidamos de eso, no solo está en nuestro poder, sino que podemos comenzar a hacerlo hoy, ahora mismo, el tiempo suficiente para leer este artículo ;-)
Las huellas de la vida
Hace unas semanas, al regresar de vacaciones, me encontré en la estación de tren de Bolonia reflexionando sobre las cosas que habían cambiado en mi vida en los últimos años y las que todavía quería cambiar. Perdido en mis pensamientos, comencé a mirar el docenas de pistas que cruzaba a la salida de la estación y formaba una red tan intrincada que era casi imposible adivinar su destino.
Esas pistas, en mi mente, se han convertido en opciones que hacemos todos los días (no, yo no había tomado LSD, aunque el perfume "Eau de Fogna" del vecino en realidad no permitía el razonamiento lúcido).
Pero volvamos a ponernos serios.
Todos los días podemos elegir si respetar o no nuestras buenas intenciones (gimnasio, dieta, estudio, trabajo, etc.), todos los días podemos elegir si nos comprometemos o no con el logro de nuestras metas, todos los días podemos elegir si para seguir persiguiendo nuestras metas, nuestros sueños.
Cada una de estas decisiones es como una vía de ferrocarril. Cuando tomamos nuestra decisión, no notamos mucha diferencia: las pistas, después de todo, continúan corriendo cerca una de la otra sin que realmente podamos decir cuál es su destino final.
Sin embargo, a medida que nos alejamos de la estación, las diferentes pistas comienzan a separarse con claridad, y cuanto más tiempo pasa, más entendemos que la elección realizada nos está llevando hacia un destino completamente diferente al de las otras pistas.
A menudo, con demasiada frecuencia, la plataforma en la que nos encontramos nos lleva a estaciones que no nos gustan para nada, y luego ...
... Empecemos a mirar el máquinas por la ventana, pensando en la suerte que tienen de poder cambiar de carril como les plazca, miramos los senderos que dejaron en el cielo aerolínea, soñando con destinos exóticos y anhelando encontrarnos en las nubes.
En definitiva, como siempre, nos centramos en todo lo que no podemos controlar, olvidando nuestro tren, olvidando que podemos revolucionar el nuestro vida en cada central ferroviaria ...
El intercambio ferroviario
La metáfora de las "huellas de la vida" se aplica tanto a elecciones equivocadas, en cuanto a la elecciones correctas. De hecho, al igual que ocurre con malos habitos, de las cuales inicialmente no captamos las desastrosas consecuencias, incluso para el buenos hábitos nos cuesta visualizar los beneficios a medio plazo: un día, impactados por la iluminación de la carretera a Damasco, decidimos cambiar de vida y finalmente activamos la central ferroviaria.
Ah ... no hay nada que nos pueda hacer sentir mejor que una "nueva pista"; pero pasan los días y la pista nueva se parece malditamente a la anterior. Entonces, tristes y desmotivados, en cuanto surge la oportunidad, decidimos volver a la vieja y cómoda ruta que tan bien conocemos.
¿Este comportamiento le recuerda vagamente a alguien? ¿Quizás alguien a quien conoces íntimamente? ;-)
Cambia tu vida binaria para siempre
Siempre que se ha quedado atascado en una vía "muerta" y ha intentado activar la central ferroviaria, sin éxito, ha surgido una idea en su mente: "no importa cuánto lo intente, nada cambiará realmente".
No hay baile más grande de lo que puedes decirte a ti mismo.
Cambiar tu vida no solo está a tu alcance, sino que te has acercado tanto tantas veces que ni siquiera te das cuenta. Si puede culparse a sí mismo por algo, no estaba haciendo ... la última milla.
¡Oye, no me malinterpretes! No digo que sea fácil, pero una vez que llegue al otro lado, estoy seguro de que entenderá de lo que estoy hablando. Por el momento, todo lo que puedo decirte es que existen 3 sencillos pasos para no repetir los mismos errores una y otra vez:
1. Decide tu estación de llegada. Los intercambios ferroviarios que activamos durante nuestra vida (los nuevos hábitos) pueden ser herramientas muy poderosas, pero una no es que puedan estar activando intercambios ferroviarios al azar, con la esperanza de llegar "a algún lado". Primero debes decidir cuál es tu destino, la estación a la que quieres llegar. Si te cuesta entender lo que quieres de la vida o cómo puedes conseguirlo, te sugiero que leas estos 2 artículos: "Cómo encontrar el propósito de tu vida", "Cómo definir una meta".
2. Recuerda que el intercambio ferroviario está en tus manos (todos los días). Muchos se limitan a cumplir escrupulosamente el punto 1, haciendo hermosos planes para su futuro, pero olvidando que es este segundo punto el que marca la verdadera diferencia. Imprima una imagen de una bolsa de ferrocarril, escriba un mantra en las vías o un rap en los ferrocarriles estatales, ¡no me importa! Solo debes recordar que tienes la capacidad de cambiar completamente de dirección todos los días de tu vida. ¡Hazlo, hazlo ahora y sigue haciéndolo!
3. No se preocupe por los resultados. Casi todo el mundo se enamora del tercer punto. Quedan atrapados en el entusiasmo inicial, se cargan como resortes y luego… ¡puf! Se desinflan de inmediato. No eres como los demás, ¿verdad? ¡¿Has entendido finalmente que no puedes rendirte ante las primeras adversidades o los primeros signos de desmotivación ?! ¿No está obteniendo los resultados deseados en poco tiempo? ¡A quién le importa! No estamos en una película de Hollywood: esta es la vida real; Si desea lograr resultados, resultados ambiciosos, primero debe concentrarse en el progreso diario y la práctica deliberada. ¿Entiendes entre? ;-)
Bueno, tienes una nueva semana por delante para hacer un buen uso de lo que hemos comentado en este artículo: no la desperdicies.