Si no establecemos límites en el tiempo que dedicamos al trabajo y no prestamos atención a las condiciones en las que trabajamos, a largo plazo podemos comprometer la calidad de nuestra vida. Por ello es importante conocer los efectos de la sobrecarga de trabajo y tratar de prevenirlos.
Última actualización: 19 de enero de 2020
La sobrecarga de trabajo es una condición cada vez más presente en nuestras vidas. Pasar gran parte de nuestro tiempo trabajando se ha convertido en una rutina para muchos de nosotros. Esta tendencia es tan común que alargamos cada vez más nuestra jornada laboral. Nos levantamos muy temprano en la mañana y regresamos a casa tarde en la noche. Básicamente, pasamos la mayor parte del día en el lugar de trabajo.
¿El exceso de trabajo puede afectar negativamente nuestra vida? Solemos pensar que si dedicamos muchas horas al trabajo, lo más probable es que no podamos dedicar tiempo a otros aspectos de nuestra vida. Y eso es correcto.
La sobrecarga de trabajo puede llevarnos a dedicar menos tiempo a nuestra vida personal, familia, amigos, etc. En este artículo te contamos sobre los posibles efectos negativos de la sobrecarga de trabajo.
El exceso de trabajo reduce la calidad de nuestra vida
Diversos estudios nos advierten sobre los riesgos físicos y psicológicos de las largas jornadas laborales. Parece que la sobrecarga de trabajo reduce considerablemente la calidad de vida de los trabajadores y disminuye su productividad.
Dedicar la mayor parte de las horas que tenemos durante la semana al trabajo compromete nuestro bienestar físico y psicológico, aunque realmente nos guste lo que hacemos. Además, la productividad disminuye a medida que pasan las horas. Si pasas mucho tiempo en el trabajo, tu mente se satura y tu rendimiento se reduce.
"El bienestar y la salud son imprescindibles, de lo contrario no podríamos mantener nuestras mentes fuertes y claras".
-Buda-
Efectos de la sobrecarga de trabajo
ansiedad
Una jornada laboral agotadora es un factor de riesgo que puede provocar ansiedad. El estrés, derivado de la sobrecarga de trabajo, provoca la secreción excesiva de ciertas hormonas como el cortisol (conocida como la hormona del estrés). En pequeñas dosis no es perjudicial porque nos prepara para afrontar determinadas situaciones.
Sin embargo, un exceso de cortisol -debido al constante estrés y la preocupación que provoca una sobrecarga de trabajo mantenida en el tiempo- podría provocarnos una molesta sensación de malestar. A nivel físico podría manifestarse como una sensación de presión en el pecho, dolor de estómago o latidos rápidos del corazón.
insomnio
No es raro que aquellos que trabajan demasiado comiencen a tener dificultades para dormir. A veces estas dificultades se convierten en insomnio crónico. Esto se debe a que la carga de trabajo es tal que la mente es incapaz de desconectarse a la hora de dormir, trayendo consigo problemas y preocupaciones. En estos casos, el sueño no es reparador y al día siguiente te sientes aún más cansado, tanto mental como físicamente.
Deterioro de las relaciones sociales
La sobrecarga de trabajo nos hace pasar menos tiempo con amigos y familiares. Además, vemos poco a nuestra pareja, a nuestros hijos oa nuestros padres. En cierto modo, nos convertimos en los eternamente ausentes y los demás ya no esperan nuestra presencia.
"Estamos rodeados de objetos diseñados para reducir la carga de trabajo y, sin embargo, tenemos poco tiempo libre para nosotros".
-Laurence J. Peter-
El síndrome de agotamiento
El síndrome de Burnout fue reconocido recientemente como una enfermedad profesional por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se considera un trastorno que afecta a nivel emocional y psicológico a parte de los trabajadores que viven en un estado continuo de estrés y ansiedad.
Un número cada vez mayor de profesionales de diversos sectores laborales padecen este síndrome. Según un estudio realizado en doce países por la European General Practice Research Network, los médicos italianos tienen niveles de estrés que duplican la media europea. Sin duda la de médicos es una profesión en la que existe un alto porcentaje de personas afectadas por el síndrome de burnout. Sin embargo, no es el único. Hoy en día el número de profesionales que padecen este síndrome es cada vez mayor.
Para concluir, le recordamos que si no limita el tiempo destinado al trabajo y no se mejoran las condiciones en las que trabaja, a largo plazo existe la posibilidad de comprometer la calidad de vida. Por tanto, es importante ser consciente de los efectos de la sobrecarga de trabajo y tratar de prevenirlos. Además, es bueno saber que cuidar tu salud mental y física es de fundamental importancia para el bienestar de todos nosotros.
