El enfoque PERMA involucra cinco acciones, hábitos o formas de ver la vida para acercarse a la felicidad.
Última actualización: 22 de abril de 2022
El acrónimo "PERMA" puede parecer extraño y absolutamente alejado del concepto de alegría. En cambio, es el acrónimo en inglés de a maravillosa corriente cuyo principal objetivo es acercarnos a la felicidad.
No solo es útil para el individuo, sino que se puede aplicar a grupos, familias o parejas. El sistema PERMA fue creado por Martin Seligman, profesor de la Universidad de Pensilvania.
Su teoría del bienestar es conocida internacionalmente y se utiliza en muchos países con resultados más que interesantes.
La búsqueda de la felicidad.
El ser humano está en constante búsqueda de la felicidad, que puede residir en un nuevo amor, un mejor trabajo, la llegada de un hijo, la compra de una casa, unas vacaciones en el Caribe o la compañía de amigos.
Si nos ponemos a pensar en cómo cada acción u objeto nos dará felicidad (teniendo en cuenta que los bienes materiales no deberían proporcionarnos ese sentimiento), podemos aplicar la teoría PERMA.
Como le gusta llamarlo al Dr. Seligman, es una descripción de lo que las personas deben hacer para acercarse a la felicidad. Cada uno tiene que analizar su vida y determinar qué pesa más en su balanza, si el amor, la salud, el trabajo, etc.
El enfoque PERMA implica cinco acciones, hábitos o formas de ver la vida, como preferimos llamarlos.
Las 5 acciones PERMA para acercarte a la felicidad
Cultivar emociones positivas
La primera letra es la "P", del inglés emociones positivas, o emociones positivas. Está comprobado que las personas optimistas se desempeñan mejor en su trabajo o se divierten, por ejemplo, con su pareja.
Se sienten bien consigo mismos y lo transmiten a los demás. Por lo tanto, debemos aprender a cultivar emociones positivas: alegría, serenidad, esperanza, gratitud, asombro, amor, inspiración y recreación. Para que puedas enfrentar el mal y superar los obstáculos.
Intervención
La segunda letra "E" deriva del compromiso inglés, que significa "participación". Seligman nos invita a involucrarnos lo más posible en las actividades que nos gustan.
Al cultivar una pasión, nos sentimos felices. Nos sentimos tan satisfechos cuando nos dedicamos a lo que nos apasiona que nos olvidamos de los problemas. Nunca nos cansamos, podemos seguir dando lo mejor de nosotros, no es una carga, sino una bendición. Descubre tus pasiones y te sentirás realizado.
Relaciones positivas para acercarnos a la felicidad
La tercera letra es la "R" de relaciones, por lo tanto relaciones. Las relaciones que construimos deben ser positivas y ayudarnos a ser mejores personas. Alejémonos de los lazos destructivos, al contrario busquemos aquellos que nos ayuden a crecer.
Seligman te invita a conectarte con lo que nos rodea y a no tengas miedo de distanciarte de aquellos que no aportan nada bueno a nuestra vida. Cultivamos las relaciones como si fueran plantas que requieren cuidados y atención para crecer.
Sentido
En cuarto lugar tenemos la letra “M”, por sentido, sentido y finalidad. Todos tenemos uno (o más) objetivos en la vida, que constituyen el verdadero sentido de la existencia humana.
En el logro de nuestras metas aprendemos, crecemos y dejamos una enseñanza a los demás. Puede ocurrir en cualquier contexto, desde la familia hasta el medio ambiente, pasando por la salud, la religión, la política o la sociedad.
Realización para acercarnos a la felicidad.
Por último, la "A" de logro, que significa éxito y resultados. Necesitamos sentirnos útiles, competentes, que nuestras acciones no son en vano y que podemos actuar con independencia.
En otras palabras, establecer metas a corto, mediano y largo plazo y desarrollar disciplina y autocontrol. Estos últimos son las mejores herramientas para alcanzar metas y acercarse a la felicidad.
Cada resultado logrado aumentará tu confianza en ti mismo y tendrás más ganas de seguir adelante, mejorando día a día.