Cuando escuchamos acerca de la tolerancia y
indulgencia hacia nosotros mismos tendemos a asociarlo con falta de fuerza
voluntad. Es decir, pensamos que estamos comiendo helado porque no tenemos suficiente
autocontrol para resistir la tentación.
de Utrecht nos ofrece una perspectiva diferente. En la práctica, los investigadores
Afirman que somos tolerantes con nosotros mismos porque creemos que está ahí.
decisión más acertada y no porque no podamos evitarla o por falta de autocontrol. De hecho, el área de tolerancia hacia
ellos mismos, fuerza de voluntad ymoderación,
Es muy interesante. Por ejemplo, se sabe que después de muchas horas duras
trabajo, es más probable que las personas se entreguen a algunas pequeñas peculiaridades, como
algún tipo de recompensa o regalo. En este sentido, los investigadores
tuvieron que crear un experimento en el que la gente creía que había
trabajó duro pero sin comprometer su fuerza de voluntad
incitándolos a perder el control. ¿Cómo lo consiguieron? Pidieron a los participantes que se sometieran
a una prueba que clasificó su nivel de dislexia. La gente tenía que
observar 200 palabras y, progresivamente usando un teclado, presionar el
tecla correspondiente a la primera letra de cada palabra. La parte interesante
consistió en el hecho de que un grupo que había completado el ejercicio en 5
Se les dijo minutos que tenían que repetirlo inmediatamente, mientras que al otro
Al grupo se le dio un descanso de un minuto entre un ensayo y el siguiente. Como puedes imaginar, el truco fue
en descanzo. El grupo al que no se le permitió descansar estaba convencido de
haber trabajado duro, aunque en realidad todos los participantes trabajaron
por la misma cantidad total de minutos. Luego vinieron todos los participantes
sometido a la prueba de Stroop, un
prueba clásica que evalúa el autocontrol; en el que viene la persona
se le pide que lea las palabras y no los colores (por ejemplo, la palabra se presenta
"Azul" escrito en amarillo). Con esta prueba se pudo confirmar que
ambos grupos tenían el mismo nivel de autocontrol. Finalmente, cada participante vino
se le pidió que calificara el sabor de algunos chocolates, dulces y chicles
masticar. ¿Los resultados? Personas que creían que habían trabajado más
duramente consumían en mayores cantidades. Esto indica que la tolerancia hacia uno mismo
ellos mismos no siempre es el resultado de la falta de fuerza de voluntad, sino
más bien puede entenderse como una especie de regalo que nos hacemos a nosotros mismos.