La mayoría de las personas que se ponen a dieta
para bajar de peso se pregunta cómo hacerlo comer
di meno. Obviamente, se requiere una buena cantidad de fuerza de voluntad, pero
También hay varios trucos psicológicos que te ayudan a comer cada vez menos.
ingerir demasiadas calorías.
automático. Por ejemplo, cuando estamos viendo una película, tragamos cantidades
palomitas de maíz enormes. Pero ahora, un nuevo estudio ha llevado al nuestro bajo el microscopio.
hábitos alimenticios y mostró cómo se pueden cambiar. Los investigadores reclutaron un total de 158
voluntarios que habrían visto películas encerradas en una sala o en un cine. PARA
a todos les dieron palomitas de maíz; un grupo recibió palomitas de maíz viejas y
rancio mientras que los otros grupos recibieron palomitas de maíz frescas y crujientes. Va
señaló que algunos de los participantes eran consumidores habituales de palomitas de maíz
y otros no. Lo curioso es que los consumidores habituales de
comieron muchas palomitas de maíz sin preocuparse demasiado por la calidad también
cuando se dieron cuenta de que era viejo. De todos modos, otro detalle fue
que la gente comía más en el cine que los encerrados en la sala.
Según los investigadores, estos resultados muestran qué hábitos son
estimulados por el contexto (en este caso el cine) y son inmunes a ciertos
circunstancias como el hambre o la calidad de los alimentos. Posteriormente llevaron a cabo un segundo experimento,
prácticamente idéntica a la primera, excepto que la mitad de la
se pidió a la gente que comiera palomitas de maíz con la mano no dominante; eso es, si
tenían razón, con la izquierda y viceversa. Esta simple manipulación limitó la ejecución.
hábito automático de comer mientras mira una película. Por lo tanto, fue posible
descubra que las personas que usaban la mano no dominante comían mucho
menos. Según los investigadores, esto se debería a que el simple
El cambio de aires ha conseguido reducir las ganas de comer. En resumen, todos aquellos que se preguntan cómo hacerlo
comer menos, ahora tienen disponible una estrategia curiosa, muy sencilla:
Detenga todos los hábitos que ayuden a fortalecer el hábito de
comer. En este caso, puede ser suficiente cambiar de escenario o comer con
una mano diferente a la que se usa habitualmente. Si a esto le sumamos otras estrategias psicológicas
muy simple, como eliminar cantidad mentalmente,
comer en habitaciones bien iluminadas, usar cubiertos y platos pequeños y
evitar distracciones como mirar televisión o trabajar en la computadora mientras comemos,
entonces quizás podamos seguir nuestra dieta más fácilmente.