La espirulina es un alga que crece en los lagos salados. con aguas alcalinas ricas en sales minerales.
Esta alga verdiazul necesita altas temperaturas que oscilan entre 30 y 40 grados para vivir.
En las raras aguas donde existen estas condiciones particulares, la espirulina se desarrolla y se recolecta para ser utilizado con fines curativos.
Su conocimiento ya tiene siglos; de hecho en México la gente de los aztecas lo usaba por sus propiedades beneficiosas y preparaba remedios naturales como bebidas regeneradoras.
Su nombre científico es Artrospira platensis y forma parte de las microalgas del género cianobacterias, capaces de consumir dióxido de carbono y liberar oxígeno gracias a la energía que toman del sol. Estas cianobacterias son muy antiguos y jugaron un papel central cuando la atmósfera y el aire que todavía respiramos hoy se crearon en los orígenes de la formación de la Tierra.
Composición de la espirulina
La espirulina se considera un superalimento porque tiene una composición de nutrientes y sustancias beneficiosas verdaderamente incomparable.
La espirulina es ante todo mucho rico en proteínas vegetales: contiene los 8 aminoácidos esenciales. Su contenido de proteínas es incluso mejor que el de los huevos, la leche, el pescado, la carne y la soja.
También contiene acidos grasos esenciales como el ácido linolénico (omega 3) y linoleico (omega 3) importantes para regular las grasas.
La espirulina es también rico en vitaminas A, C, D, E, K y en particular del grupo B (B1, B2, B3). En su interior también podemos encontrar una pseudovitamina de B12 que, sin embargo, parece no estar activa en el organismo, por esta razón la espirulina no puede considerarse una fuente confiable y segura de vitamina B12.
Finalmente se considera un tónico natural ya que contiene muchas sales minerales como hierro, calcio y magnesio y también microminerales como manganeso, cromo, cobre, zinc y selenio. La espirulina es baja en sodio y yodo, otra ventaja para quienes tienen que seguir una dieta baja en sodio o tienen problemas de tiroides.
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Las propiedades de las algas espirulina
Su riqueza en proteínas, vitaminas y minerales la hacen espiriulina energizante, tónico y remineralizante altamente eficaz, por ello es excelente para cualquier edad así como para deportistas y para quienes eligen una dieta vegetariana y vegana.
Tiene un bajo poder calorífico y por lo tanto también se utiliza para aquellos que emprenden dietas de adelgazamiento, teniendo también un poder saciante Bastante alto. Incluso durante el embarazo y la lactancia puede ser de ayuda para las nuevas madres aunque siempre es recomendable consultar a su médico antes de tomarlo.
La espirulina puede ser considerado el complemento natural por excelencia, útil en todos aquellos casos en los que existan carencias de nutrientes. Solo para dar una idea de la proporción, por ejemplo, el contenido de hierro es 34 veces mayor que el de las espinacas.
La espirulina, que contiene vitamina C, vitamina E y betacaroteno, precursor de la vitamina A, es un antioxidante excepcional; es por tanto capaz de contrarrestar los radicales libres y prevenir los daños del envejecimiento.
Además, cada vitamina lleva consigo sus propiedades: dando solo dos ejemplos, la vitamina C a estimula la producción de glóbulos blancos y colágeno para la piel, y es esencial para la absorción de hierro, en cambio la presencia de vitamina E hace que la espirulina sea capaz de activar el sistema inmunológico y apoyar el vascular.
No en vano la espirulina es útil para prevenir enfermedades cardiovasculares también gracias a la presencia de ácidos grasos esenciales omega 3 y 6: el ácido linoleico presente en la espirulina es un anticoagulante con alto poder antiinflamatorio y también es capaz de reducir los niveles de colesterol; Al mismo tiempo, los omega 6 actúan sobre el control de los valores de colesterol reduciendo el colesterol malo (LDL) y reequilibrando los porcentajes de triglicéridos en sangre.
Dosis de espirulina
La espirulina se vende generalmente seco y pulverizado en forma de tabletas o en polvo libre para diluir en agua u otra bebida.
La dosis no debe ser inferior a un gramo porque por debajo de ella no es eficaz; la dosis recomendada es de 5 gramos por día. Generalmente al principio toman 2 gramos y aumentan gradualmente hasta el umbral de 5 gramos. Esta dosis no debe excederse también para evitar cualquier contraindicación.
Sigue siendo una buena idea leer la etiqueta del producto y buscar siempre una cadena de producción certificada para tener más garantía de la calidad de este suplemento natural.
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