Una creencia popular es que una de las formas más efectivas de combatir el insomnio es contar las ovejas antes de conciliar el sueño. Nunca lo he usado pero hace unos años un estudio desarrollado por la Universidad de Oxford nos hizo saber que contar ovejas no ayudaría a conciliar el sueño. De hecho, en un mundo donde una de cada diez personas sufre de insomnio crónico y en el que este problema por sí solo le costaría a la economía norteamericana unos 35 mil millones de dólares al año, entre accidentes automovilísticos y absentismo laboral, no es de extrañar que los científicos se preocupen por evaluar la efectividad de diferentes métodos (populares o no) para combatir insomnio. Para demostrar la ineficacia de este antiguo remedio para el insomnio, los investigadores reclutaron una muestra de 50 voluntarios que se dividieron en tres subgrupos: el primero tenía que contar ovejas, el segundo imaginaba panoramas relajantes y el tercero podía elegir el método que preferían. ayudarte a dormir. Los resultados mostraron que el grupo que imaginaba escenas relajantes pudo conciliar el sueño en promedio 20 minutos antes que los demás. Sin embargo, a las personas que contaban ovejas les resultaba mucho más difícil conciliar el sueño. Evidentemente, estos resultados son perfectamente comprensibles dado que el hecho de contar ovejas te obliga a seguir una secuencia numérica y por ello te obliga a concentrarte manteniendo el cerebro alerta, bastante diferente a dormir. Por el contrario, dejarse llevar por imágenes relajantes favorece lentamente la inhibición de la corteza cerebral y en consecuencia la aparición del sueño.