En el imaginario popular hay una tendencia a asociar el nostalgia a un sentimiento negativo de que
sería mejor evitarlo porque nos hace vulnerables. Sin embargo, en los últimos años
Se han realizado varios estudios científicos que demuestran los beneficios resultantes
de la nostalgia.
combatir la soledad y reducir el impacto de sentimientos negativos relativos
a su propia muerte. Ahora, un grupo de investigadores de la Universidad de Southampton,
demostró que la nostalgia también nos da placer a nivel físico
haciéndonos sentir más tolerantes y aumentando nuestra percepción del calor Todo comenzó con un experimento muy simple,
los psicólogos pidieron a 19 personas que llevaran un diario durante 30 días
consecutivo. En el mismo tuvieron que transcribir todos esos momentos y actividades
eso lo hizo sentir nostálgico. El primer resultado que surgió fue que el
la gente sentía más nostalgia en los días fríos. Más tarde, los investigadores ampliaron la muestra para
90 personas. A un grupo se le pidió que se sentara en una habitación.
frío (20 grados Celsius) mientras otro grupo se acomodaba en una habitación
más cálido (28 grados Celsius). A cada persona se le pidió que hablara sobre el
música favorita y amigos cercanos, pidiéndoles que señalen
cuánta nostalgia sintieron al evocar estos recuerdos. Así es como resultó
que las bajas temperaturas fomentan la nostalgia, pero hasta ahora se trata del descubrimiento del agua
caliente. Algo que todos conocemos bien. Pero los investigadores hicieron una
otro experimento mucho más interesante, en esta ocasión participaron 64 personas. A un grupo
pidieron recordar cualquier cosa que no tuviera un significado preciso
mientras que a un segundo grupo se le pidió que evocara una situación que
Causó nostalgia. Cada persona tenía que mantener una mano en un balde con
de hielo durante el mayor tiempo posible. Bueno, aquellos que sintieran nostalgia podrían
su mano en el hielo durante un período más largo. Esto significa que el
la nostalgia nos ayuda a soportar el dolor. Los investigadores creen que la nostalgia juega uno
función homeostática que permite que nuestra mente retroceda a esos momentos
de alegría vivida previamente para generar un sentimiento confortable,
no solo mental sino también físicamente. Esta idea ha sido "confirmada" un
a partir de técnicas de neuroimagen gracias a las cuales se comprobó que la
la nostalgia provoca una activación de la "corteza insular anterior", una zona
involucrado en la representación fisiológica del cuerpo y en la conciencia
emocional.