La gente miente más en el correo electrónico que cuando escribe con lápiz y papel. Con este curioso resultado nos sorprende Naguin, investigador de la Universidad de DePaul, quien puso a prueba la honestidad de 48 alumnos del curso de Gestión Empresarial con un juego financiero.
A estos estudiantes se les ofreció una suma imaginaria de $ 89, luego tuvieron que decidir cuánto de esta suma le confesarían a su pareja y cuánto estarían dispuestos a compartir con él. Algunos de los participantes compartieron esta información por correo electrónico, mientras que otros tuvieron que escribirla en una hoja de papel. Los resultados sorprendieron a los propios investigadores: el 92% de los jóvenes que compartieron la información por correo electrónico mintieron, mientras que solo el 63% de los que la compartieron escribiéndola en un papel dieron datos falsos. Aún más interesante fue el hecho de que las personas que mintieron en los correos electrónicos se sintieron menos responsables al ofrecer más justificaciones de su comportamiento. Sorprendidos por esta diferencia de comportamiento, aparentemente por el simple hecho de haber cambiado el método de transmisión de información, los investigadores decidieron replicar la prueba, esta vez en un escenario informal fuera del laboratorio. En esta ocasión participaron en el experimento un total de 177 directivos. Los participantes formaron grupos de tres en los que cada miembro tenía que actuar como si fuera el director de un proyecto científico tratando de obtener un fondo en efectivo. Se utilizó dinero real para hacer que el juego fuera lo más real posible. Hacemos hincapié en que los participantes se conocían y se les dijo que al final del juego se revelarían todas las mentiras. Una vez más, los jugadores tuvieron que compartir la información por correo electrónico o escribiéndola en una hoja de papel. Una vez más, las personas que usaban el correo electrónico para comunicarse tendían a mentir y hacer trampa más que otras. Este estudio en el que la mentira y la tecnología se relacionan no es el primero de su tipo, en un artículo anterior ya me había referido a que la gente tiende a mentir más en los mensajes de texto enviados a través del teléfono móvil. ¿A qué se deben estas diferencias? Desde mi punto de vista, la respuesta es muy simple: la gente siente que el correo electrónico es un medio bastante impersonal y, por lo tanto, no se identifica completamente con lo que escribe. Esto hace que su responsabilidad desaparezca frente a la pantalla. Por el contrario, escribir en una hoja de papel tradicionalmente lo consideramos una forma en la que nos sentimos más implicados personalmente y por ello seríamos más cautelosos.