Todo trabajador necesita un salario económico, pero también un salario emocional. Hoy descubriremos cómo aumentar este último, en qué consiste y qué consecuencias positivas podemos lograr.
Última actualización: 15 de marzo de 2020
Pagar adecuadamente al trabajador y, de hecho, pagar extra o dar bonos es un incentivo para seguir haciendo bien su trabajo. Sin embargo, el salario no es lo único que importa. Hay algo que importa más: el salario emocional.
El profesor de Neurociencia y Liderazgo Estratégico Steven Poelmans afirma que “el salario emocional es el conjunto de retribuciones no dinerarias que el trabajador recibe de la empresa para la que trabaja y que complementa el salario normal con fórmulas creativas, que se adaptan a las necesidades de la trabajadores. de hoy".
El salario emocional ofrece varios beneficios. El principal es motivar a los empleados, pero también permite, y es quizás el aspecto más importante, para "retener" a los trabajadores con talento en la empresa. Este último punto es tan fundamental que le dedicaremos más espacio en este artículo. Pero empecemos por hacer una distinción entre los diferentes tipos de salario emocional que existen en la actualidad.
Tipos de salario emocional dentro de una empresa
Aunque los tipos de salario emocional dependen del sector y, en concreto, de la empresa, podemos destacar aquellas que se consideran básicas para el bienestar de los empleados y para el buen funcionamiento de la organización. Ellos son los siguientes:
- Un buen ambiente de trabajo: es fundamental que los trabajadores se sientan cómodos y que el trabajo en equipo funcione. Los psicólogos empresariales pueden ayudar a resolver los diversos conflictos que puedan surgir, con el fin de gestionarlos de la forma más adecuada.
- Desarrollo personal y profesional: ofrecer formación a los empleados para que puedan seguir adquiriendo conocimientos y asegurar sus competencias es fundamental. Si además se les ofrece la oportunidad de crecer dentro de la empresa, seguramente esto tendrá un impacto positivo.
- Compatibilidad con la privacidad: ofrecer días libres para visitar médicos o presidir eventos personales, así como horarios flexibles, poder trabajar desde casa una vez a la semana o tener días libres para hacer tus propias tareas son algunas ideas que funcionan bien.
- Tener voz en las decisiones comerciales: poder confiar en la opinión de los empleados para tomar decisiones es importante. Son parte fundamental de la empresa. Sin ellos, nada funciona. Por eso, darles voz, escucharlos y demostrarles que son importantes es un tipo de cheque emocional muy importante.
El trabajo más productivo es el producido por un hombre feliz.
-Victor Pauchet-
La importancia de no dejar ir el talento
En cierto modo, las opciones con las que pagar el salario emocional en una empresa ayudan a retener el talento. Esto a pesar de que es necesario entender qué tipo de trabajadores queremos contratar. Cada empresa tiene sus propios valores. y si los candidatos que se postulan para el puesto que ofrecemos no cumplen con estos criterios, por mucho que intentemos ofrecerles un salario emocional, los resultados no serán los esperados.
Para ello, todas las empresas deben tener una idea clara de su “candidato o trabajador ideal”. De esta forma, también podrán destacar algunos tipos de salario emocional que pueden ser realmente importantes, y dejar en un segundo plano los que lo son menos.
Las personas talentosas aportan un gran valor. Están dotados de mentes creativas, ayudan a impulsar el negocio y lograr resultados que antes parecían inalcanzables. Son personas que entran en la categoría de “candidatos ideales” y que, una vez adquiridos, sería un error dejarlos ir.
El valor añadido de una empresa.
Un salario decente a fin de mes no es suficiente para garantizar que los empleados talentosos continúen en la empresa. Si otra empresa les ofreciera un horario más flexible, un espacio destinado a guardería para niños pequeños, una cocina para almorzar para que no tengan que salir de la oficina o espacios para descansar y tomar un descanso… ¿lo rechazarían?
Mi trabajo es darle a mi personal los conocimientos suficientes para que puedan ocupar mi lugar.
-Steve Jobs-
Todo trabajador necesita un determinado salario emocional, no solo para sentirse apreciados, sino también para seguir creciendo, desarrollándose y dando lo mejor de sí mismos a la empresa. Esto dará como resultado un insumo que conducirá al logro de metas y éxitos. Una relación laboral de la que tanto la empresa como los trabajadores saldrán ganando.