Il cacao que consumimos es la semilla de la planta del cacao (Theobroma cacao), perteneciente a la familia Sterculiacee, de la cual se obtiene el polvo utilizado en la elaboración del chocolate
El cacao se cultiva en los países de clima tropical de América Central y del Sur y África Occidental. Los principales productos obtenidos del cacao en grano, mediante procesos que provocan cambios de color y textura, son:
- Cacao en polvo, que también contiene una parte de manteca de cacao, obtenido mediante un proceso mecánico y utilizado para la elaboración de chocolate y como ingrediente en otros productos de pastelería;
- Manteca de cacao, que constituye la sustancia grasa, utilizada como ingrediente en el chocolate, pero también para la preparación de productos cosméticos.
El cacao está compuesto por: azúcares (64%); grassi, manteca de cacao (22%); proteína (6%); sales minerales (4%), principalmente potasio, sodio, fósforo, calcio, hierro y zinc; teobromina (1,7%), un alcaloide, que es una sustancia a base de nitrógeno similar a la cafeína; cafeína en cantidad mínima; aceites esenciales y taninos, componentes menores que dan el aroma y el color del cacao característico de la semilla.
El alto porcentaje de azúcar y grassi hace del cacao un alimento muy energético y nutritivo: unas 330 kcal por 100 g de polvo amargo. Por tanto, es una sustancia especialmente indicada para la realización de actividades con elevado gasto energético.
El efecto estimulante sobre el sistema nervioso central, que varía de un individuo a otro, se debe a la teobromina. La pequeña cantidad de cafeína contenida en el cacao refuerza el efecto estimulante de la teobromina y favorece la digestión.
Los estudios realizados hasta el momento muestran, contrariamente a lo que generalmente se cree, que no existe un vínculo directo entre el consumo de cacao y trastornos como dermatosis, acné, caries dental, urticaria y aumento del nivel de colesterol en sangre.
Propiedades, beneficios y uso de la manteca de cacao