Tenerlo todo para ser feliz: familia, amigos, trabajo... Sin embargo, sentir una tristeza constante, una apatía que no tiene ningún sentido. ¿Por qué nos deprimimos si no hay deficiencias significativas en nuestra vida?
Escrito y verificado por el psicólogo. ObtenerCrecimientoPersonal.
Última actualización: 14 de diciembre de 2021
Un buen trabajo, seguridad financiera, seres queridos, una familia maravillosa y amigos que siempre están ahí. Sin embargo, algo anda mal, lo trastorna todo y te pone triste.
No ser feliz a pesar de que todo a su alrededor es favorable es una experiencia común. Una tremenda contradicción existencial muchas veces mediada por una depresión latente. Sin embargo, queremos darle sentido a todo, buscamos una explicación objetiva para todo.
Sin embargo, debemos aceptar que los trastornos mentales no siempre tienen un origen claro. En el caso específico de la depresión, es común caer en ese abismo sin saber qué nos impulsó a llegar allí. Y cuando eso sucede, nos enfadamos con nosotros mismos porque no somos felices cuando deberíamos serlo.
Un alma triste puede matarte más rápido, mucho más rápido que un germen
-John Steinbeck-
Razones por las que uno está triste a pesar de tenerlo todo (aparentemente)
¿Por qué estoy triste si mi vida va bien? Haciendo una búsqueda en internet, descubriremos que esta es una pregunta que suele aparecer en foros o redes sociales.
Mucha gente se hace preguntas como: "¿Por qué me diagnosticaron depresión si no tengo motivos para estar triste?", "¿Por qué no puedo valorar lo que tengo?".
Todavía no entendemos la anatomía de los trastornos del estado de ánimo. Seguimos pensando que la depresión es una forma de tristeza, sobre todo, ponemos la única responsabilidad en nosotros mismos.
“Tienes ansiedad, porque eres demasiado intenso y no sabes tomar la vida de otra manera”, “Sufres depresión porque eres débil, perezoso y no sabes apreciar lo bueno que te rodea”.
Tal razonamiento es peligroso y alimenta aún más el sentimiento de culpa.. La depresión es una condición donde confluyen múltiples factores y no todos están bajo nuestro control.
Tenerlo todo no siempre es sinónimo de felicidad y bienestar
Puede que tengamos el mejor trabajo del mundo y una pareja maravillosa, pero no ser felices. Puede suceder, pero necesitamos identificar el elemento que causa el caos.
A veces damos por hecho que ciertas dimensiones nos harán felices porque es "socialmente esperado". cuando en realidad el auténtico bienestar puede derivar de otros aspectos menos "normativos".
Si te preguntas por qué has estado triste durante tanto tiempo sin motivo aparente, si reflexionas a menudo sobre tu vida, deberías detenerte un momento.
Ciertos factores como el estrés indican que a pesar de tener una familia y unos amigos preciosos, no es posible disfrutarlos. La falta de propósito y metas a largo plazo también tiende a nublar nuestro bienestar.
Estar triste es una condición médica, no una elección
Nadie elige su depresión.. Ninguna persona cae voluntariamente en un trastorno del estado de ánimo. Las depresiones son condiciones de origen multifactorial y no todas ellas están bajo nuestro control. Los siguientes factores pueden afectar:
- Aspectos neurológicos. El trabajo de investigación realizado en el Departamento de Psiquiatría de la Escuela de Medicina Mount Sinai en Nueva York indica el impacto de las variables neurobiológicas en la depresión. Los genes, por lo tanto, se encuentran entre los aspectos a considerar.
- Adversidad Psicosocial en la Infancia. Las personas que siempre se sienten tristes a pesar de que su vida es buena, necesitan mirar hacia atrás y recordar su infancia. A veces, incluso con un presente feliz, la carga de un trauma pasado aumenta el riesgo de depresión.
- Estrés mantenido en el tiempo. Podríamos tenerlo todo, un buen hogar, estabilidad económica, una pareja a la que amar… Aun así, soportar situaciones estresantes durante varios meses es un factor de riesgo para la depresión.
La persona que se siente deprimida "sin razón" cuando todo va bien en su vida puede ser más reticente a pedir ayuda.
Aparta la mirada de lo que tienes y concéntrate en tus emociones
Cuando uno se siente triste sin una causa evidente, muestra un doble sufrimiento. Uno se siente culpable, incluso desagradecido. ¿Por qué no soy feliz si mi pareja me ama y tengo una familia? Esta decepción prolonga la solicitud de ayuda profesional, navegando entre la vergüenza, la frustración y la rareza.
Ojalá ese vacío pase por sí solo, que solo será un mal momento. Sin embargo, la apatía, la desesperación y los pensamientos negativos no desaparecen, se intensifican.
Es importante pedir ayuda cuando los pensamientos negativos y la angustia emocional se vuelven constantes. Más allá de más allá de lo que tenemos, cómo nos sentimos es la dimensión más relevante.
