Tristeza, apatÃa o apatÃa son sÃntomas que indican que algo anda mal. Sin embargo, muchas personas llevan estas cargas sobre sà mismas sin hacer nada al respecto, sin comunicarse y sin pedir ayuda. Pero, ¿por qué ocultan lo que sienten? ¿Qué podemos hacer si nos encontramos en esta situación?
Última actualización: 17 de abril de 2020
Vivir sin ganas es el reflejo global de la apatÃa y la desmotivación ante las expectativas sobre el presente y el futuro. Despertarse cada dÃa en este estado puede convertirse en un auténtico calvario. Una subida cada vez más empinada debido a la inercia que rige nuestro estado mental.
No olvidemos que vivir sin ganas significa dedicar tiempo a las actividades aun con la sensación de no tener fuerzas para llevarlas a cabo. En cierto sentido hay que hacer un esfuerzo extra, debido al peso, para conseguir objetivos económicos (desayunar, vestirse, ducharse…). Por otro lado, la apatÃa es tan fuerte que se vuelve casi imposible tomar iniciativas.
"Lo opuesto al amor no es el odio sino la apatÃa".
-Leo Buscaglia-
Vive sin ganas, en silencio
La apatÃa suele pasar desapercibida, ya que se tiende a sustituir la falta de motivación por el esfuerzo. El entorno familiar y el cÃrculo de amigos de la persona que vive en una espiral de apatÃa pueden no notar el dolor que siente. PodrÃamos pensar: pero ¿cómo sabemos si está plagada de apatÃa constante si se comporta como siempre lo hace?
Éste es un punto importante. Muchas veces no damos importancia al estado emocional de las personas que nos rodean, precisamente por la ausencia de señales evidentes. La persona sigue haciendo su trabajo, cumpliendo obligaciones familiares y reuniones sociales. Incluso podrÃamos ver el reflejo de una sonrisa en su rostro; sin embargo, no hay entusiasmo dentro de ella.
"La tristeza es también una especie de defensa".
-Ivo Andric-
Ante la apatÃa, evita los lugares comunes
Cuando alguien nos dice cómo es, cómo se siente, muchas veces tendemos a caer en el cliché de: "no es nada", "ya verás pasar", "a todos les pasa", "oblÃgate", "no no le des demasiada importancia". Aunque nuestra intención es positiva, para la persona que vive sin ganas, escuchar las clásicas frases motivadoras puede no ser nada reconfortante. Por el contrario, la sensación de no ser comprendida podrÃa llevarla a cerrar el canal de comunicación.
Entonces, ¿qué debemos hacer si alguien nos dice que está en un fuerte estado de apatÃa? Bueno, esa persona puede necesitar nuestro apoyo y escucha activa: para sentirse comprendida, para entender lo que le pasa, para estar ahà con ella. Puede que le resulte reconfortante expresar lo que significa para usted vivir sin deseos y tener que recurrir a la voluntad para realizar cada actividad.
«El desánimo es la piedra que inevitablemente tendrás que pisar para cruzar el rÃo. También puedes caerte, pero siempre puedes levantarte y nadar para cruzar.
-Anónimo-
Más allá de la apatÃa
Vivir sin ganas, de forma apática, puede tener un componente fisiológico, según afirma un grupo de investigación. Los eruditos correlacionan desmotivación y apatÃa a circuitos cerebrales especÃficos que en algunos casos pueden mostrar anomalÃas en su funcionamiento. Es probable que detrás de la apatÃa se escondan condiciones que van mucho más allá de las circunstancias externas.
A su vez, la apatÃa podrÃa ocultar patologÃas y trastornos psicológicos subyacentes, como la depresión mayor o la distimia. Ante esto, uno de los primeros pasos para superar este estado es descartar problemas médicos (factores causales hormonales y orgánicos) y/o psicológicos.
Dejando de lado el origen de la apatÃa, es importante buscar apoyo. Podemos acudir a familiares y amigos, o a un profesional especializado, ya que el sufrimiento a menudo nos abruma hasta tal punto que necesitamos ayuda externa para superarlo.
"Si no has aprendido de la tristeza, no puedes apreciar la felicidad".
-Nana Mouskouri-